El ex secretario general de la OTAN Anders Fogh Rasmussen urgió este viernes al Gobierno español a entregar «mucha más» ayuda militar a Ucrania, al tiempo que defendió acelerar la adhesión de ese país a la Alianza e instalar un escudo antimisiles similar a la «cúpula de hierro» de Israel.
En un encuentro en Madrid con un pequeño grupo de medios, entre ellos EFE, el político danés desgranó el mensaje que planeaba transmitir poco después en sendas reuniones en los ministerios españoles de Defensa y Asuntos Exteriores.
«España podría y debería hacer mucho más», dijo el que fuera titular de la OTAN entre 2009 y 2014, que actualmente dirige la consultora Rasmussen Global.
Rasmussen matizó, sin embargo, que valora «enormemente» el acuerdo bilateral para los próximos diez años firmado la semana pasada durante la visita a Madrid del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
En virtud de ese arreglo, España entregará a Ucrania 1.000 millones de euros este 2024, que podrán llegar a los 5.000 millones en 2027, para mejorar su respuesta ante la invasión rusa.
Aún así, el extitular de la OTAN recalcó que España debería llegar al 2 % del PIB en su gasto en defensa, así como «entregar lo antes posible sus sistemas de misiles Patriot a Ucrania».
El acuerdo bilateral recién cerrado con Ucrania ya incluye la entrega de Patriot y este mismo mes se enviará un lote de esos misiles junto a carros de combate Leopard y algún robot antiminado, dijo esta semana la ministra española de Defensa, Margarita Robles.
Rasmussen también planeaba pedir al Gobierno español que permita a Ucrania utilizar las armas que le ha entregado para atacar objetivos militares en territorio de Rusia, como ya ha hecho EE.UU.
La OTAN y una «cúpula de hierro» para Ucrania
Por otra parte, Rasmussen insistió en su recomendación de que los países miembros de la OTAN inicien el proceso de adhesión de Ucrania a la Alianza ya el mes que viene, en la cumbre de líderes prevista en Washington.
«Obviamente, sería algo sin precedentes invitar a la OTAN a un país que ya está en guerra (…), pero (no hacerlo) le da a (el presidente ruso, Vladímir) Putin un incentivo para continuar la guerra», opinó.
El proceso de integración en la OTAN lleva tiempo, pero el Grupo Internacional de Trabajo Yermak-Rasmussen, que él lidera junto al jefe de la oficina presidencial ucraniana Andrí Yermak, ha propuesto trazar una hoja de ruta que permita concretar la adhesión de Ucrania en 2028.
No obstante, a juzgar por las conclusiones de la reunión de ministros aliados de finales de mayo en Praga, no es probable que en la cumbre de líderes de la OTAN se inicie el proceso para esa adhesión de Ucrania.
El que también fuera primer ministro danés entre 2001 y 2009 abogó además por «establecer un escudo de defensa de misiles localizado en territorio de la OTAN, a lo largo de las fronteras occidentales con Ucrania».
«Podría compararse con el que tenemos para proteger a Israel contra los misiles y drones iraníes. En principio, podríamos hacer exactamente lo mismo en el caso de Ucrania», afirmó.
Polonia ya ha propuesto, con el apoyo de Grecia, construir un sistema defensivo antiaéreo europeo sobre su país, fronterizo con Ucrania; algo que el primer ministro polaco, Donald Tusk, ha descrito como «una cúpula de hierro», el mismo nombre del escudo antimisiles de Israel.
Esa iniciativa cuenta con el respaldo de la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, que aspira a la reelección en estas elecciones europeas. EFE
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