El Gobierno estadounidense consideró este jueves que la continua negativa del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela a defender los estándares internacionales y venezolanos de transparencia o a respetar la voluntad del pueblo venezolano expresada en las urnas es una «violación inaceptable» de las leyes del país.
«Los venezolanos votaron, los resultados están claros y su voluntad debe respetarse», dijo en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Su declaración, difundida tras haberse cumplido un mes de los comicios del 28 de julio en Venezuela, criticó igualmente el intento del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), «controlado por (el presidente venezolano, Nicolás) Maduro, de silenciar las voces de los votantes ratificando el anuncio infundado del CNE de una victoria de Maduro».
Miller subrayó que Estados Unidos reitera su llamamiento al respeto de los derechos humanos y las normas democráticas en Venezuela, «la liberación de todos los presos políticos y el fin de los arrestos arbitrarios y otros actos de represión contra miembros de la oposición democrática, los medios de comunicación y la sociedad civil».
Manipulation, repression, and censorship have not changed the results of the Venezuela election. One month later the outcome is clear: Edmundo González Urrutia got the most votes. It is time for Maduro and his representatives to acknowledge and respect the will of the Venezuelan…
— Matthew Miller (@StateDeptSpox) August 29, 2024
En el mes transcurrido desde que los venezolanos acudieron a las urnas, Nicolás Maduro y sus representantes han manipulado los resultados de esas elecciones, proclamado falsamente su victoria y llevado a cabo una represión generalizada para mantenerse en el poder. Estados Unidos aplaude el coraje y la resiliencia de los millones de venezolanos que votaron y que siguen pidiendo pacíficamente que Maduro reconozca que Edmundo González Urrutia recibió la mayoría de los votos. A pesar de los reiterados llamados de los venezolanos y la comunidad internacional, el Consejo Nacional Electoral (CNE) controlado por Maduro no ha podido corroborar los resultados anunciados mediante la presentación de actas originales, como lo hizo después de las elecciones de 2013 y 2018. La continua negativa del CNE a respetar los estándares internacionales y venezolanos de transparencia o a respetar la voluntad del pueblo venezolano expresada en las urnas es una violación inaceptable de las leyes de Venezuela, como lo es el intento del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) controlado por Maduro de silenciar las voces de los votantes venezolanos al ratificar el anuncio infundado del CNE de una victoria de Maduro. En cambio, a principios de esta semana, uno de los rectores del CNE de Venezuela confirmó que Maduro no ha aportado ninguna prueba de que haya ganado estas elecciones.
En lugar de responder a las demandas del pueblo venezolano de transparencia y democracia, Maduro ha intensificado la represión mediante amenazas con objetivos políticos, detenciones injustas e indiscriminadas y censura en un intento desesperado de aferrarse al poder por la fuerza. Las acciones de Maduro han exacerbado la crisis venezolana y lo han dejado cada vez más aislado de la comunidad internacional. Estados Unidos y sus socios internacionales han criticado a Maduro y a sus representantes por sus acciones desde las elecciones:
La Organización de los Estados Americanos adoptó una resolución por consenso el 16 de agosto en la que se pide transparencia, revisión imparcial y protección de la integridad electoral, en consonancia con el compromiso de la región de defender la Carta Democrática Interamericana.
Estados Unidos, la UE y más de 20 gobiernos firmaron una declaración conjunta el 16 de agosto en la República Dominicana en la que se pide transparencia electoral en Venezuela.
Estados Unidos se unió a diez socios regionales para emitir una declaración conjunta el 23 de agosto condenando la decisión del TSJ de certificar la afirmación del CNE de que Maduro ganó.
Estados Unidos se unió a otras naciones el 28 de agosto para convocar una sesión especial del Consejo Permanente de la OEA para abordar las repercusiones de la crisis electoral en los derechos humanos.
Estados Unidos reitera su llamado a que se restablezca el respeto de los derechos humanos y las normas democráticas en Venezuela, la liberación de todos los presos políticos y el fin de los arrestos arbitrarios y otros actos de represión contra miembros de la oposición democrática, los medios de comunicación y la sociedad civil. Los venezolanos han votado, los resultados son claros y su voluntad debe ser respetada.
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.