Que Pedro Sánchez decidiera este domingo acompañar a los Reyes, en lugar de mandar a un ministro en su visita a las zonas afectadas por la DANA, no ha hecho más que tensionar a los vecinos de Paiporta, la localidad más damnificada. Al grito de «Sánchez dimisión», los Reyes han recalado en Paiporta cuando la comitiva, en la que también se encontraba el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, ha comenzado a ser abucheada por los vecinos al grito de «asesinos», «asesinos». Y de los abucheos al barro, las piedras y los cubos. Los vecinos, desesperados ante el sufrimiento de estos días, les han arrojado todo lo que tenían su alcance.
Por ABC
Aun así, mientras Pedro Sánchez abandonaba la comitiva nada más llegar tras ser golpeado con un palo, Don Felipe y Doña Letizia han seguido adelante, con enormes medidas de seguridad que no han fallado en los momentos más críticos. Los Reyes, con lágrimas en los ojos, han intentado hablar con todos los vecinos que podían, pero no les han permitido entrar en Paiporta. Se han quedado a las puertas del pueblo mientras calmaban a los vecinos.
Los vecinos se quejaban de que «precisamente hoy» hubiera llegado el Ejército al pueblo: «Qué casualidad. Hoy justo llegan los militares para sacar un poco de barro. Justo cuando vienen ellos». De hecho, al final de su visita, que ha tenido que ser suspendida por la tensión vivida, se ha visto a muchos miembros del equipo de escolta con barro en la cara y uno de ellos con una brecha en la frente.
Ante la tensión, impotencia y crispación de la gente, se entiende que desde el Palacio de la Zarzuela no quisieran dar detalles sobre la visita de los Reyes. No por una cuestión de seguridad, sino porque los Reyes lo que no querían era que se entendiera su visita como en un principio se ha entendido: una visita oficial en la que solo iban a pasar revista.
En el momento en que a Sánchez le han dado en la cabeza, al Rey le han tirado cubos de barro, pero Don Felipe ha pedido que no le protegieran con el paraguas.
Entre los vecinos, reinaba la confusión al tiempo que increpaban a la comitiva. Gritaban «asesino» al Rey, pero al mismo tiempo le llamaban Pedro Sánchez. La Reina ha recibido también abucheos y barro en la cara. «Cómo no van a sentirse así. Cómo no van a estar cabreados», ha afirmado Doña Letizia a ABC. Mientras tanto, Don Felipe, en otro punto de la calle, ha intentado hablar con los afectados. A ellos, les ha dicho que «entiende» su situación y que él y la Reina están con ellos, con el pueblo.
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