Una ciudadana ecuatoriana confirmó que el migrante venezolano Jorman Godoy Palencia, de 21 años de edad, fue golpeado hasta la muerte el pasado viernes por parte de funcionarios de la Policía Metropolitana en Guayaquil, Ecuador.
Por El Nacional
La mujer negó que Godoy Palencia le haya levantado la mano a una funcionaria, como quieren hacer ver autoridades locales.
“Eso es mentira porque yo estaba detrás de él. No entiendo por qué tanto maltrato hacia un muchacho. Ni ladrón era para que lo hayan tratado de esa manera… Le pegaron en el piso, le patearon la cabeza, esposado le estaban pegando; no sé si porque era negro, o porque era venezolano”, señaló la mujer en un video que colgó en sus redes sociales la activista de derechos humanos Betzabeth Jaramillo.
La testigo mencionó que la oficial que divulgó que el joven la había atacado, la insultó y le gritó. La escena fue presenciada por otro policía, quien solo se limitó a decirle a su compañera que se calmara y la retiró del lugar.
La mujer contó que, tras la golpiza, Godoy fue arrastrado por los policías, quienes se lo llevaron en una moto. “Ellos dicen que se lo entregaron a sus familiares, pero eso es mentira; nosotros lo encontramos en la esquina del parque Chile ya agonizando. Presentaba golpes que no tenía”, recordó entre lágrimas.
Reportes de medios locales indicaron que el migrante venezolano se dedicaba al comercio informal en la bahía de Guayaquil. El día de los hechos, Godoy Palencia salió a trabajar y fue interceptado por los oficiales, quienes aparentemente le exigían dinero para permitirle trabajar o, de lo contrario, confiscarían su mercancía.
El venezolano se negó y recibió gas de pimienta y una golpiza por parte de al menos 10 agentes metropolitanos, que quedó registrada en algunos videos que se difundieron por redes sociales.
Posteriormente, su cuerpo en estado crítico fue encontrado en el parque Chile. Algunos comerciantes aseguraron que el hombre fue trasladado por familiares y amigos en vehículo particular hasta el hospital, donde fue ingresado sin signos vitales.
La Policía de Ecuador mencionó en un comunicado de prensa que el venezolano agredió a un funcionario, por lo que fue llevado a la sede policial. Allí, los agentes municipales desisten de la denuncia y el hombre «se habría retirado de la sede policial por sus propios medios y en compañía de un familiar».
En el texto, no hacen mención a la agresión en contra del venezolano. El organismo policial finalizó diciendo: «La Policía Nacional lamenta lo acontecido y se encuentra presta para que, de forma coordinada con la Fiscalía General del Estado, se realicen las investigaciones que permitan esclarecer este suceso».
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