Los abogados de inmigración en la isla de Curazao aseguran que los venezolanos detenidos son deportados de manera colectiva, debido a que las celdas para extranjeros en el Sentro di Detenshon i Korekshon Korsou (SDKK) están sobrepobladas.
Johan Rodríguez, de la Fundación Barcos de Venezuela, asegura que Curazao espera más venezolanos procedentes desde la Vela de Coro en el estado Falcón. “Manifestamos todos los días en la playa contra el cierre de las fronteras, de las cuales somos víctimas. Esta ciudad depende de los patrones y vendedores de frutas que normalmente regresan con dinero de Curazao. Puedes ganar dinero allí, dólares. No aquí, no hay nada más que traiga dinero”, expresó.
Por su parte, el abogado de inmigración Adir Ajubi confirma que “muchos venezolanos detenidos hablan papiamento o conocen muy bien la isla. Algunos han estado aquí con más frecuencia y muchos de ellos regresarán la próxima vez que sean deportados”, mientras que la abogada Maya Elzinga-Soumah, dice que 22 de los venezolanos que fueron arrestados y transferidos al servicio de inmigración en las últimas semanas han solicitado protección bajo el Artículo 3 del Convenio Europeo de Derechos Humanos (CEDH).
Ajubi también confirma que sus clientes generalmente no saben cómo solicitar protección.
Curazao no tiene un procedimiento de asilo, pero bajo la presión de los Países Bajos ahora ha emitido una instrucción oficial que debe garantizar el cumplimiento, entre otras cosas, del Artículo 3 del CEDH. Se estipula que una persona no puede ser devuelta si no se puede garantizar su seguridad.
Al respecto, Elzinga-Soumah “Esa instrucción requiere un procedimiento cuidadoso en el que los venezolanos también son informados de la posibilidad de recibir asistencia legal”, dice Elzinga-Soumah. “La mayoría de ellos obtienen inmediatamente la llamada decisión de expulsión sin escuchar la razón por la que abandonaron su país. Esa es una violación de los derechos humanos según lo estipulado en el CEDH”.
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El ministro de Justicia, Quincy Girigorie, dice que no sabe “si se han seguido los procedimientos en estos casos específicos. Prometo verificar eso. Sin embargo, las celdas de la prisión están superpobladas y que ahora están buscando reubicar a la mayoría en una nueva ubicación en Willemstad”.
En las últimas dos semanas, 97 venezolanos fueron interceptados por la guardia costera en tres barcos en el mar y encarcelados.
Desde que el régimen de Maduro cerró las fronteras entre las islas caribeñas de Aruba, Curazao y Bonaire en febrero de 2019, ha estado relativamente tranquilo en el mar y, a menudo, solo se interceptaron los transportes de drogas, pero desde el pasado mes de octubre la situación cambió.
“Esa instrucción requiere un procedimiento cuidadoso en el que los venezolanos también son informados de la posibilidad de recibir asistencia legal”, dice Elzinga-Soumah. “La mayoría de ellos obtienen inmediatamente la llamada decisión de expulsión sin escuchar la razón por la que abandonaron su país. Esa es una violación de los derechos humanos según lo estipulado en el CEDH”. Su colega Ajubi confirma que sus clientes generalmente no saben cómo solicitar protección.
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Entretanto, el ministro de Justicia, Quincy Girigorie, dice que no sabe si se han seguido los procedimientos en estos casos específicos. Él promete verificar eso. Sin embargo, confirma que las celdas de la prisión están superpobladas y que ahora están buscando reubicar a la mayoría en una nueva ubicación en Willemstad.
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