La falta de gas doméstico ha golpeado la producción del sector panadero, hasta el punto de que muchos integrantes han tenido que reducir sus cantidades de horneado e incluso tener que paralizar por completo sus actividades.
Daimar Díaz | La Prensa de Lara
Cada dos o tres meses les distribuyen gas doméstico a granel a las grandes panaderías y cilindros de 10 kilos a las panaderías pequeñas lo que ha causado grandes pérdidas.
«Sufrimos por el gas porque muy poco nos despachan las bombonas, en ocasiones nos ha tocado tener que comprarlas bachaqueadas, pero la verdad no resulta rentable. Pedimos que el sector panadero sea tomado en cuenta para tener un despacho de gas con mayor frecuencia y poder seguir atendiendo a todos los clientes», expresó Aldri Velázquez.
Tener que abrir y sólo ofrecer productos sellados al vacío que poco son comprados por los clientes de las panaderías es la manera como enfrentan la crisis con el servicio, sin embargo expresan que la mayoría de las personas que se acercan es en busca de pan y al no tener, prefieren retirarse con las manos vacías.
«El pan es el producto más buscado porque muchas familias están viviendo el mismo problema con la falta de gas y comprar pan es como resuelven la cena, pero hemos perdido muchos clientes por tener los hornos apagados», agregó Ricardo Pastrán.
Pastrán comentó que en su panadería dejaron a la mitad su producción de pan, o por pedidos para ahorrar el poco gas con el que cuentan el cual lo tuvieron que pagar en billetes verdes.
«Ya prácticamente trabajamos con clientes fijos, el que quiera pan lo encarga y los sacamos después del mediodía para no tener que prender y apagar el horno a cada momento», aseveró. Pastrán comentó que la bombona pequeña que había logrado comprar tuvo un valor de 25 dólares, cantidad que supera los ingresos de la semana, establecimiento que ya comienzan a agonizar.
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