El presidente peruano, Martín Vizcarra, dijo el martes que hubo errores de la policía en la intervención a una discoteca que dejó 13 personas muertas en plenas restricciones por la pandemia y anunció una investigación para castigar a responsables.
Reuters
El presidente peruano, Martín Vizcarra, dijo el martes que hubo errores de la policía en la intervención a una discoteca que dejó 13 personas muertas en plenas restricciones por la pandemia y anunció una investigación para castigar a responsables.
El hecho se produjo hace más de una semana en un club nocturno de un distrito de Lima que operaba de forma clandestina y donde las víctimas murieron asfixiadas o aplastadas mientras buscaban salir de la discoteca por una angosta escalera tras la llegada de la policía para poner fin a la fiesta.
Un video de la intervención policial -de la misma discoteca- fundido por un canal de televisión local mostró imágenes en la que se ve a un policía con la puerta de salida cerrada, desmintiendo la versión oficial de que fueron los asistentes los que sellaron la puerta en medio de la presión por la estampida.
“Hemos podido apreciar que los protocolos de intervención de la policía no han sido los que correspondían”, dijo Vizcarra durante una conferencia de prensa. “Lo que nos lleva a la conclusión que ha habido decisiones inadecuadas que no podemos ni vamos a justificar”, agregó el mandatario.
Vizcarra exhortó que se realicen a profundidad las investigaciones por parte de Ministerio Público y por la misma policía nacional “para determinar las responsabilidades que hubo y el castigo que corresponda a las malas acciones de las personas que participaron en esta intervención”.
La tragedia se produjo en medio de un rebrote de la enfermedad en Perú que registró hasta el lunes 652.037 contagiados, la segunda cifra de infecciones más alta en América Latina y la quinta en el mundo. Los fallecidos sumaron 28.944 en un contexto de una crisis sanitaria con hospitales abarrotados de pacientes por COVID-19 y una recesión económica.
Partidos políticos de oposición en el Congreso ha solicitado la renuncia del ministro de Interior por este episodio.
El hecho se produjo hace más de una semana en un club nocturno de un distrito de Lima que operaba de forma clandestina y donde las víctimas murieron asfixiadas o aplastadas mientras buscaban salir de la discoteca por una angosta escalera tras la llegada de la policía para poner fin a la fiesta.
Un video de la intervención policial -de la misma discoteca- fundido por un canal de televisión local mostró imágenes en la que se ve a un policía con la puerta de salida cerrada, desmintiendo la versión oficial de que fueron los asistentes los que sellaron la puerta en medio de la presión por la estampida.
“Hemos podido apreciar que los protocolos de intervención de la policía no han sido los que correspondían”, dijo Vizcarra durante una conferencia de prensa. “Lo que nos lleva a la conclusión que ha habido decisiones inadecuadas que no podemos ni vamos a justificar”, agregó el mandatario.
Vizcarra exhortó que se realicen a profundidad las investigaciones por parte de Ministerio Público y por la misma policía nacional “para determinar las responsabilidades que hubo y el castigo que corresponda a las malas acciones de las personas que participaron en esta intervención”.
La tragedia se produjo en medio de un rebrote de la enfermedad en Perú que registró hasta el lunes 652.037 contagiados, la segunda cifra de infecciones más alta en América Latina y la quinta en el mundo. Los fallecidos sumaron 28.944 en un contexto de una crisis sanitaria con hospitales abarrotados de pacientes por COVID-19 y una recesión económica.
Partidos políticos de oposición en el Congreso ha solicitado la renuncia del ministro de Interior por este episodio.
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