Al menos 29 protestas se registraron este 28 de septiembre en el Oriente de Venezuela, donde también hubo 23 detenidos. La gente rompió la cuarentena y salió a la calle para exigir mejores servicios públicos al gobierno de Nicolás Maduro a quien, además, le reclaman por el despacho de combustible, que en el caso de esta región del país tiene casi dos meses escaso.
De esa cantidad de manifestaciones, el equipo de corresponsales de El Pitazo registró 14 protestas en Nueva Esparta, 6 en la zona norte de Anzoátegui, 5 en Cumaná y 4 en Carúpano, ambas en Sucre; en esta última ciudad ocurrieron los hechos más violentos: un herido por perdigones y agresiones a los manifestantes por parte de la Guardia Nacional (GN) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Ese herido responde al nombre de Paulo Caraballo, quien recibió atención médica en el hospital de Carúpano y ya se encuentra en su residencia, donde recibió a una comisión de la Gobernación de Sucre con medicamentos supuestamente enviados por el gobernador Edwin Rojas.
Caraballo era uno de los protestantes de Playa Grande, que reclamó por gas doméstico. El cierre de vías fue reprimido con disparos al aire, jalones de cabello a las mujeres y maltrato a los hombres, según denunciaron los habitantes el lunes en la mañana; la gente usó piedras para defenderse de los militares.
Las 23 detenciones que hubo este lunes en la región oriental del país ocurrieron en Nueva Esparta. A través de una minuta, la GN difundió un listado con los nombres de todas las personas arrestadas ese día e informó que todas fueron encontradas colocando barricadas en distintos puntos de Porlamar, entre ellos la avenida 4 de Mayo, el Sambil y Rattan.
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