La primera ministra, Jacinda Ardern, decreta tres días de confinamiento absoluto para tratar de hacer frente al primer caso de la variante Delta.
A las 23:59 de este martes 17 de agosto, hora de Nueva Zelanda, comenzaron tres días de confinamiento absoluto para todos los habitantes de este país. Durante este periodo de tiempo, todas las personas deben permanecer en sus casas y solo quedarán abiertos los servicios esenciales como farmacias o supermercados para hacer compras de primera necesidad.
Esa medida excepcional llega después de que el país de las antípodas haya encontrado 1 solo caso de transmisión de coronavirus. Se trata de un hombre de 58 años que no estaba vacunado y que dio positivo en Auckland, la ciudad más poblada de Nueva Zelanda. Sin embargo, es el primer positivo desde el pasado mes de febrero, por lo que las autoridades quieren que la situación no se les escape de las manos.
La primera ministra, Jacinda Ardern, ha explicado que el paciente que dio positivo había estado viajando por buena parte del país, por lo que, a su juicio, el cierre es necesario: «Somos uno de los últimos países del mundo en tener la variante Delta en nuestra comunidad. Estamos en condiciones de aprender de la experiencia en el extranjero y ver qué acciones funcionan y qué acciones no funcionan».
Objetivo: cero contagios
Nueva Zelanda es uno de los países que menos contagios ha sufrido: apenas se han diagnosticado 2.900 casos y solo hay constancia de 26 víctimas. Por eso, Jacinda Ardern explica que la variante «Delta ha protagonizado un cambio de juego. Significa que debemos volver a hacer todo lo posible rápidamente para detener la propagación. Hemos visto lo que puede suceder en otros lugares si no logramos superarlo. Solo tenemos una oportunidad».
Para leer la nota completa, pulsa aquí
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.