Los cuerpos en estado de descomposición fueron encontrados en el sector conocido como isla Morro o Bakamuju, a una hora de Curiapo, parroquia Curiapo del municipio Antonio Diaz, en la desembocadura del Orinoco.
Por: Kapé-Kape
Una comisión mixta de seguridad, coordinada y conformada por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalística (Cicpc), la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, Ministerio Público, Defensoría del Pueblo y el Tribunal de Justicia, encabeza las averiguaciones del hallazgo de 8 waraos fallecidos de un presunto naufragio en los primeros días de febrero.
Los cadáveres flotaron en estado de descomposición, para el asombro de los moradores indígenas de la zona que los encontraron.
La comisión que investiga las causas de los fallecimientos regresó el pasado lunes 7 de febrero de la zona, y aún se desconoce el resultado preliminar de las investigaciones, aunque el naufragio y muerte por inmersión son las hipótesis que cobran mayor fuerza por las características que presentan los cadáveres hallados.
De acuerdo con una fuente policial, entre los fallecidos se encuentran adultos, mujeres y niños indígenas waraos.
La actuación de grupos armados en la zona también forma parte de las suposiciones sobre la muerte de estos 8 waraos.
Los habitantes del sector presumen que son migrantes waraos que buscaban cruzar la frontera bordeando las costas y la desembocadura del Orinoco.
De acuerdo con los datos de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, Acnur, la República de Guyana aloja 2.500 indígenas migrantes, desplazados desde Venezuela en busca de mejoras de condiciones y oportunidades.
En el informe de “Ruta del Migrante Indígena 2021” elaborado por Kapé Kapé, en este último año el perfil del migrante indígena se inclinó en su mayoría hacia los hombres de Delta Amacuro y Amazonas, siendo su rango de edad mucho más amplio que en el años 2020, inclinándose hacia una migración tanto de adultos jóvenes como de adultos mayores, dentro de los cuales se encuentra un grupo importante de estudiantes y profesionales como docentes, también artesanos y agricultores, que poseen niveles de estudio superiores a los registrados en 2020.
Con información de Kapé- Kapé