Migrantes recrearon este Viernes Santo la Pasión de Cristo en la mexicana Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos, para reafirmar su fe en que podrán continuar su camino en medio de las políticas antiinmigrantes de Texas.
EFE
En la «Casa del Migrante», albergue al norte de la ciudad, se realizó el tradicional viacrucis, en el que decenas de solicitantes de asilo que participaron en esta actividad religiosa para agradecer por seguir con bien y mantener la esperanza de cruzar al país del norte.
Desde varios meses atrás, los involucrados ensayaron esta representación con la vestimenta característica, desde los guardias romanos hasta los habitantes de la época.
Jonatan Pacaya, migrante de Guatemala, comparó la procesión de Jesucristo con el «calvario» que han recorrido los centroamericanos.
«Hemos visto muchas cosas y ha sido costoso el trayecto de Guatemala para acá. Gracias a Dios y a esta organización que nos han ayudado bastante, tenemos comida, camas, cobijas, todo lo que necesitamos», contó el guatemalteco a Efe.
La procesión en Ciudad Juárez, fronteriza con El Paso, ocurre mientras Texas eleva la presión por la llegada de migrantes y la decisión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de eliminar el Título 42, una política de la era de Donald Trump que permite la expulsión inmediata de indocumentados con el argumento de la pandemia.
La región vive un flujo migratorio récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detectó a más de 1,7 millones de indocumentados en la frontera con México en el año fiscal 2021, que terminó el 30 de septiembre.
En este contexto, con el ritual religioso los migrantes esperan transmitir que «han vivido un calvario muy difícil», según relató Jesús Rosales, de Honduras.
«Ha sido muy difícil la situación, y es así como seguimos caminando con muchos peligros, pero gracias a Dios llegamos aquí», dijo.
Los participantes del viacrucis mantienen la fe a pesar del endurecimiento de las políticas en Texas, cuyo gobernador, el republicano Greg Abbot, ha exigido a los estados fronterizos mexicanos que refuercen la retención de migrantes.
«Sí, estamos esperando. La esperanza no se pierde, es lo que menos se debe perder, hacemos un esfuerzo como él (Jesús) lo hizo por nosotros, y nosotros por la familia. Y seguiremos luchando hasta donde Dios diga», indicó Rosales.
Gladys Mirel, de Guatemala, aprovechó el acontecimiento religioso para apelar a la compasión al recordar que ellos están huyendo de la delincuencia.
«Necesitamos que nos dejen pasar y nos abran las puertas y vivir un futuro feliz. Jesucristo murió por nosotros», expresó.
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.