El Departamento del Tesoro de Estados Unidos informó este viernes que sancionó a dos funcionarios cercanos al presidente de El Salvador, Nayib Bukele por considerar que están involucrados en posibles actos de corrupción y violaciones a derechos humanos.
Se trata del ministro de Trabajo, Rolando Castro y el secretario Jurídico de la Presidencia, Conan Castro.
A Rolando Castro, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos lo sanciona por apropiación indebida de fondos públicos para su propio beneficio, por la manipulación de sindicatos con fines políticos personales y a favor del gobierno de Bukele, según se explica en un comunicado de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), divulgado también en El Salvador por la embajada de Estados Unidos en ese país centroamericano.
Castro usó su cuenta de Twitter para cuestionar la decisión. “El Departamento del Tesoro sin competencias en materia laboral y dice sancionar por entrega o no de credenciales”.
Tras las sanciones, El Departamento del Tesoro puede congelar activos, si se encuentran en territorio estadounidense, así como prohibir el ingreso de los sancionados y sus familiares cercanos al país norteamericano. Esta decisión se ampara en la Ley Magnitsky, que faculta la cancelación de visas a extranjeros vinculados a casos de corrupción y violaciones a los derechos humanos.
“Al pueblo de los EEUU mi respeto y aprecio. A su gobierno les digo, congelen mis cuentas bancarias en su país, les autorizo”, agregó Castro en su mensaje.
En el caso Conan Castro, secretario Jurídico de la Presidencia, las autoridades estadounidenses lo señalan por obstaculizar las investigaciones sobre posibles malos manejos de fondos públicos utilizados por el gobierno para atender la emergencia por el covid-19. Tras la publicación de las sanciones, Castro no se ha pronunciado. CNN espera respuesta a la petición de comentarios de Castro y el gobierno a través de la Secretaría de Comunicaciones de la Presidencia de El Salvador.
En diciembre de 2021, el gobierno de Estados Unidos sancionó a otros funcionarios por supuestos vínculos a hechos de corrupción, entre ellos Carolina Recinos, jefa de Gabinete del gobierno de Bukele.
«Está claro que el gobierno de Estados Unidos no acepta colaboración, amistad o alianza. Es sometimiento absoluto o nada. Se ven hasta absurdas esas acusaciones diarias. No sabía que les interesara tanto El Salvador. Tal vez lo que les interesa, es detener el ‘mal ejemplo'», escribió entonces Bukele en su cuenta de Twitter.
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