“Querido, Niño Jesús”, con esta expresión que tradicionalmente usan los niños y niñas en las cartas que ponen en el árbol de Navidad para pedir sus regalos, los caraqueños también hicieron sus peticiones. Y, aunque viven en zonas distantes, coincidieron en que la mejora de los servicios públicos sería el mejor regalo para sus comunidades.
Por Crónica Uno
Érika Cordero, vecina del sector Las Piñas, en la Tercera Vuelta del Atlántico, pidió para su comunidad que las instituciones públicas trabajen con eficiencia y eficacia en su control de gestión en pro del bienestar colectivo.
El Paraíso
Gaudys Guariman, residente del sector Fe y Alegría, parroquia El Paraíso, dijo que en el callejón Caripito necesitan alumbrado, porque hay callejones oscuros. También contó que los tubos de una alcantarilla están podridos y esta situación representa peligro para todos, en especial niños, niñas y adultos mayores.
En la misma parroquia, pero en el barrio La Coromoto, Damaris Pérez espera que las autoridades arreglen las caminerías, dos tubos de agua rotos y el alumbrado, que tiene más de seis meses sin luz. Pidió el asfaltado de la calle y la mejora de la distribución de la bolsa del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP).
Douglas Gómez, vecino del barrio Fe y Alegría, desea que se creen las condiciones para que se constituya una instancia operativa de interacción y participación ciudadana donde sea posible de forma periódica el encuentro para la articulación, coordinación y planificación de todas las acciones necesarias para atender las situaciones en relación con los servicios públicos: agua, electricidad, gas, telefonía, residuos sólidos y medio ambiente.
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