Kesha ha vivido unos años muy complicados. En 2014 comenzó una demanda contra el productor Dr. Luke, a quien acuso de “agresión sexual, violencia de género, acoso civil, prácticas comerciales injustas e infligir angustia emocional”. Casi una década más tarde, la lucha legal continúa, y en julio próximo, ambas partes se volverán a ver las caras en los tribunales.
Mientras tanto, Kesha trata de poner en orden su vida laboral y privada. El primer paso fue el lanzamiento de Gag Order, su quinto álbum de estudio, cuyo título es una referencia del caos que ha vivido durante su batalla contra Dr. Luke. En una reciente entrevista para la revista Self, Kesha compartió varios detalles sobre cómo ha sobrellevado esta disputa.
“Tenía que arrojar luz sobre los lados más oscuros de lo que ocurre en mi mente. Esta era yo diciendo: ‘Sí, he tenido esta orden de silencio implícita, autoimpuesta desde que tengo uso de razón, porque todavía estoy en litigio’”, dijo Kesha sobre su situación con Dr. Luke.
Kesha ahondó con Self los diversos problemas de salud que la han aquejado en los últimos años, entre ellos, la inmunodeficiencia común variable (IDCV), un desorden del sistema inmunitario que desarrolla bajos niveles de proteínas, lo que se traduce en constantes infecciones en diferentes partes del cuerpo.
La IDCV causó graves estragos en Kesha, primero cuando la cantante trató de cumplir con todas las entrevistas, sesiones de fotos y compromisos que llegan con la fama.
Según la artista, no quería perder su única oportunidad en la industria de la música, por lo que trató de aguantar hasta donde pudo. El resultado fue terminar “completamente agotada”.
Ahora, en 2023, la IDCV tuvo consecuencias casi fatales en Kesha después que buscara congelar sus óvulos. “Casi muero en enero”, reveló la cantante en una entrevista. Dos semanas después del procedimiento, Kesha brindó un show en las Bahamas; al finalizar se sintió muy cansada para siquiera caminar y fue de inmediato al hospital.
Ahí, los doctores se percataron de que su condición causó varias complicaciones tras la cirugía. Kesha fue traslada a otro hospital en Miami, donde terminó de recuperarse, y aunque se siente mucho mejor, aseguró que tardó un par de meses para estabilizarse, describiendo todo el proceso como “horroroso”.
Respecto a la decisión de congelar sus óvulos, Kesha comentó lo siguiente: “Simplemente tomé mi salud reproductiva en mis propias manos. Y apoyo que todo el mundo haga eso y [honre] su cuerpo”.
Kesha también aprovechó la entrevista para hablar sobre su nueva relación con un hombre al que ha decidido dejar en el anonimato, pero que los tabloides han identificado como Riccardo Madalosso. En relación con su decisión de tener un mejor control de su salud reproductiva, la cantante hizo una reflexión sobre qué es lo que ella considera “familia” hoy en día.
“Realmente no quería mencionar la relación, porque creo que formar una familia es una decisión de cada uno, y la familia puede significar muchas cosas diferentes para cada uno. Mi familia ahora mismo son las personas con las que paso el tiempo, mi familia de verdad, mi grupo de música, mis amigos y mis gatos”.
Otra de las prioridades de Kesha hoy en día es la salud mental, sobre todo después de haber superado la bulimia que la aquejó durante gran parte de la década pasada.
“Tengo un sistema de apoyo de terapeutas con los que hablo semanal o mensualmente. Después de no permitirme comer o disfrutar de la comida durante tanto tiempo en mi vida, realmente di un giro, y ahora, me encanta la comida, joder. Empecé a cocinar; voy al mercado de agricultores”.
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