Tras los devastadores incendios forestales que arrasaron Maui el mes pasado, las miradas de preocupación se ponen sobre la campaña de desinformación lanzada desde China, que está empleando técnicas avanzadas de inteligencia artificial (IA) para propagar noticias falsas en una maniobra sin precedentes que podrían marcar una nueva era de caos informativo.
Por Infobae
Los incendios forestales que asolaron Maui, con 115 muertos y todavía decenas de desaparecidos, se convirtieron en un nido de desinformación, no solo con actores de Rusia, sino también del gigante asiático. Rápidamente se difundieron por Internet mensajes falsos en los que se afirmaba que la catástrofe no era natural, sino el resultado de un “arma meteorológica” secreta que Estados Unidos estaba probando.
Para que estas afirmaciones parecieran más auténticas, los mensajes incluían fotografías aparentemente generadas por programas de inteligencia artificial, lo que supone un cambio significativo con respecto a las campañas de desinformación tradicionales.
Según un reportaje del New York Times, investigadores apuntan que China está creando una red de cuentas que podría utilizar en futuras operaciones de información, incluidas las próximas elecciones presidenciales estadounidenses. Ese un patrón similar al que Rusia estableció con miras a las elecciones de 2016.
En publicaciones de agosto, en medio de la devastación y la desesperada búsqueda de sobrevivientes, los trolls seleccionaron imágenes para sugerir falsamente que sólo los objetos azules “sobrevivieron” al incendio, y que esto prueba de algún modo que la isla hawaiana fue alcanzada por un láser que provocó el fuego o causó todos los daños.
Los mensajes suelen incluir un vídeo de una cuenta de TikTok que comparte imágenes de objetos cotidianos quemados por un láser industrial manual en un taller. El vídeo muestra cómo el láser quema telas amarillas, rojas y verdes, mientras que una muestra azul queda indemne, con un texto que dice que se puede programar para “diferentes longitudes de onda”. Las imágenes contrastan con las de Lahaina, la histórica ciudad de Maui que fue arrasada en su mayor parte por el incendio, y señalan que un coche azul y algunas sombrillas de playa azules no fueron destruidos por el infierno.
Microsoft, empresa que fue hackeada por piratas chinos, publicó recientemente un informe que arroja luz sobre esta alarmante evolución, revelando pruebas de que agentes vinculados a China utilizan imágenes generadas por IA para aumentar la credibilidad de sus campañas de desinformación. Según el reporte, estas imágenes vienen siendo utilizadas al menos desde marzo, y atraen una mayor participación de los usuarios reales de las redes sociales. Se trata de uno de los primeros casos conocidos en los que un Estado nación emplea IA generativa en sus operaciones cibernéticas.
La campaña de desinformación de China en torno a los incendios forestales de Maui representa un cambio sustancial de táctica. Anteriormente, las campañas de influencia de China se centraban principalmente en amplificar la propaganda para defender sus políticas, sobre todo en relación con Taiwán. Sin embargo, las recientes revelaciones indican que Beijing está tomando ahora medidas más directas para sembrar la discordia en Estados Unidos.
Aunque el impacto de la campaña de desinformación china sigue siendo difícil de cuantificar, los primeros indicios sugieren que las teorías conspirativas más extravagantes no lograron calar hondo entre los usuarios de las redes sociales. Brad Smith, presidente de Microsoft, criticó a China por explotar una catástrofe natural para obtener beneficios políticos: “Simplemente no creo que eso sea digno de ningún país, y mucho menos de un país que aspire a ser un gran país”.
Brian Liston, investigador de Recorded Future, una empresa de ciberseguridad, comentó al Times sobre el cambio en la estrategia de desinformación de China: “Esto va en una nueva dirección, que es una especie de amplificación de las teorías de conspiración que no están directamente relacionadas con algunos de sus intereses, como Taiwán.”
A medida que se acercan las elecciones de 2024, los servicios de inteligencia de Estados Unidos creen que China podría intentar afectar la campaña del presidente Biden y elevar el perfil del republicano Donald Trump, dada la presunta preferencia de China por este último. Es probable que los diferentes enfoques de ambos líderes hacia Asia y las políticas tecnológicas hayan influido en esta inclinación.
La promoción por parte de China de una teoría conspirativa en torno a los incendios forestales de Maui sigue a las críticas del presidente Biden sobre el papel de Beijing en la difusión de falsas acusaciones sobre laboratorios de armas biológicas estadounidenses en Ucrania. Aunque no hay pruebas directas de colaboración entre Rusia y China en sus operaciones de información, a menudo se hacen eco mutuamente de sus mensajes, sobre todo cuando critican las políticas estadounidenses, lo que sugiere una nueva fase en las guerras de desinformación, reforzadas por herramientas de IA.
El origen de la campaña de desinformación sobre los incendios forestales de Maui fue denunciado por primera vez por Recorded Future, que reveló que China había orquestado una campaña encubierta para culpar a un “arma meteorológica” de los incendios. Estas afirmaciones falsas circularon por varias plataformas de redes sociales, como Pinterest, Tumblr, Medium y Pixiv. Recorded Future señaló que el contenido chino amplificaba a menudo las publicaciones de teóricos de la conspiración y extremistas en Estados Unidos, incluidos supremacistas blancos.
La campaña china operaba en varios idiomas, lo que sugiere que su objetivo era una audiencia global. El Centro de Análisis de Amenazas de Microsoft identificó mensajes no auténticos en 31 idiomas, lo que demuestra el amplio alcance de esta campaña de desinformación. Las imágenes generadas por IA identificadas por los investigadores de Microsoft se encontraron en múltiples plataformas. Estas imágenes específicas parecían ser utilizadas exclusivamente por cuentas chinas implicadas en la campaña, lo que subraya aún más la sofisticación de las tácticas de China.
Clint Watts, Director General del Centro de Análisis de Amenazas de Microsoft, estableció paralelismos entre el enfoque de China y el manual de operaciones de influencia de Rusia, destacando la construcción de cuentas encubiertas como una táctica clave para influir en la política de Estados Unidos y otros países.
“Lo que estamos viendo tras el incendio de Maui ha sido muy similar a lo que hemos visto tras una serie de catástrofes, provocadas por el hombre o de otro tipo, que es un intento de culpar a una cábala secreta de crear condiciones terribles con el fin de marcar el comienzo de un nuevo orden mundial”, declaró Mike Breen, director ejecutivo de la organización antiextremista Human Rights First, citado por The Guardian.
Sin embargo, aunque no sea una novedad, el esfuerzo de China por presentar a Estados Unidos como una potencia temeraria y militarista, sugiriendo que probó armas secretas contra sus ciudadanos, representa una peligrosa escalada.
Se espera que este tipo de teorías conspirativas se intensifiquen a medida que aumenten las catástrofes debido a la crisis climática, que será uno de lso principales temas de debate de cara a las elecciones de 2024.
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.