La ONU ha movilizado un equipo de expertos en la coordinación de ayuda internacional que tenía en Marruecos y lo ha enviado a Libia, donde considera que todavía se desconoce la verdadera magnitud del desastre provocado por un ciclón y el derrumbe de dos represas que destruyeron la ciudad de Derna y causaron graves daños en otras localidades.
«Las inundaciones y los torrentes de lodo, y la consiguiente destrucción de las edificaciones siguen escondiendo el nivel de muerte y necesidad en Libia», dijo hoy el secretario general adjunto de la ONU para asuntos humanitarios, Martin Griffiths, quien se encuentra en Ginebra para dirigir los planes logísticos de asistencia a Libia y a Marruecos.
Precisó que la necesidades más urgentes en Libia son albergue para las personas que han perdido sus hogares y todas sus pertenencias, alimentos, material médico para prevenir enfermedades infecciosas y agua potable, así como apoyo psicosocial para ayudar a los afectados a seguir adelante tras un trauma de tales dimensiones.
EFE