Paraguay recibió este viernes un millón de dosis de Pfizer donadas por Estados Unidos, la mayor remesa llegada al país, que permitirán avanzar con una vacunación contra la covid-19 que hasta ahora ha beneficiado a algo más de 900.000 personas, en su mayoría con una aplicación, sobre una meta de más de cuatro millones de paraguayos.
EFE
La carga aterrizó en el aeropuerto internacional de Asunción para ser almacenada en una policlínica estatal y desde el sábado repartida por 217 vacunatorios del país suramericano, que acumula cerca de 14.000 fallecidos por la covid.
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— Juan S. Gonzalez (@Cartajuanero) July 10, 2021
Ello de cara a comenzar la próxima semana con la vacunación de personas entre 35 y 49 años, estando también previsto que luego sean aplicadas a los adolescentes de entre 12 y 17 años con enfermedades de base, franja compatible con la vacuna de Pfizer.
El vicepresidente, Hugo Velázquez, agradeció a Estados Unidos la donación en sus funciones de jefe del Ejecutivo tras el viaje esta mañana a Miami del mandatario Mario Abdo Benítez, después de la identificación la víspera de tres familiares desaparecidos en el derrumbe de un edificio en esa ciudad.
«Hoy se está encendiendo de vuelta la esperanza. Estamos recibiendo un millón de dosis del bien más precisado por la humanidad (..,) Agradecemos al pueblo norteamericano en la persona de su presidente Biden y vaya el agradecimiento del presidente de la República y de todo el pueblo paraguayo a la gran nación norteamericana», dijo Velázquez.
En el acto protocolario, en el espigón presidencial, el encargado interino de negocios de la Embajada estadounidense, Joseph Salazar, afirmó que la «donación es una prueba positiva de la solidez de las relaciones entre Estados Unidos y Paraguay».
«Estados Unidos no abandonó a su amigo y socio y hoy cumple la promesa del presidente Biden de compartir vacunas por el mundo», dijo Salazar, quien añadió que se trata de algo «sin condiciones».
«Estamos haciendo esto no para ganar favores, sino para salvar vidas», acotó.
Por su parte, el canciller paraguayo, Euclides Acevedo, destacó lo que consideró un «soplo de consuelo y esperanza, un gesto entre amigos y socios, aliados estratégicos, el reflejo de la solidaridad internacional».
Antes, el ministro de Salud, Julio Borba, abrió el capítulo de agradecimientos al presidente Joe Biden en nombre de Abdo Benítez, incidiendo en que con esas vacunas la cartera podrá comenzar la inmunización a nuevas franjas etarias.
La donación de Estados Unidos fue anunciada a finales de junio por la subsecretaria de Estado de ese país, Victoria Nuland, durante su visita a Asunción.
La remesa supone un salto cualitativo en la distribución de vacunas a Paraguay, cuyo Gobierno se confió desde un primer momento al mecanismo multilateral Covax, al que compró unos 4,3 millones de dosis, de las que ha recibido 304.800 dosis.
Ante este retraso, que provocó indignación ciudadana y también críticas a Covax desde el propio Gobierno, el Ejecutivo buscó alternativas con otros laboratorios, así como donaciones de distintos países, como Chile, Uruguay, México, Catar y, ahora, Estados Unidos.
El cargamento estadounidense eleva a 2.493.350 las dosis recibidas por el momento, de las que 858.750 vacunas fueron compradas y 1.634.600 proceden de la cooperación internacional.
Paraguay comenzó su plan de inmunización contra el coronavirus en febrero, con el personal sanitario y los adultos mayores.
El país suramericano, con una población de poco más de 7 millones de personas, acumula 13.729 fallecidos, 388.138 recuperados y 434.264 contagiados, desde marzo de 2020, cuando se detectó el primer caso de coronavirus.
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