El coronavirus ha silenciado los ruidosos estadios japoneses. Los tradicionales cánticos con tambores y coreografías elaboradas no se están viendo en los campos de entrenamiento, pues los equipos de la Nippon Professional Baseball han decidido jugar los encuentros de pretemporada a puerta cerrada.
En el país del sol naciente juegan varios venezolanos que han tenido que adaptarse a algunos pequeños cambios para evitar ser contagiados.
El contacto con los fanáticos ya no es el mismo… Nos prohibieron totalmente firmar autógrafos, darnos las manos con los fanáticos o cualquier contacto físico para evitar la propagación y mantenernos a todos seguros”, comentó a Beisbol Play el venezolano Ernesto Mejía, primera base de los Leones de Seibu.
Las medidas de higiene se extiende incluso hacia los reporteros que cubre la pelota nipona, pues son examinados al igual que los peloteros, para monitorear su temperatura corporal.
“Llevamos una rutina de higiene mucho más fuerte de lo normal. Todas las mañanas nos chequean la temperatura corporal para descartar que cualquier miembro del equipo esté infectado”, expresó el inicialista.
Aunque los equipos no le han prohibido a los jugador salir a la calle, si les han recomendado evitar sitios concurridos.
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