La cantante estadounidense Britney Spears se sinceró recientemente sobre sus inseguridades, temores y los obstáculos que enfrentado a lo largo de su vida, especialmente durante los años que estuvo sometida a una tutela legal que le cedió el control de su vida a su padre, Jamie Spears.
Spears anunció su embarazo hace unas semanas y confesó haber sufrido depresión perinatal por el escrutinio al que se sometió por su aspecto físico antes de sar a luz a sus hijos mayores.
Explicó tambien que durante su adolescencia su padre la llamaba gorda y que ella nunca cuestionó si era lo suficientemente bonita como para ser famosa hasta que su familia comenzó a presionarla para que fuera perfecta.
«Una de las cosas que más me duele es que siempre me decían que estaba gorda y que nunca era lo suficientemente buena. Mi padre siempre me hizo sentir que tenía que intentarlo, intentarlo, ¡intentarlo! A lo grande. Arruinó la semilla profunda de mi existencia, la semilla que me hacía sentir hermosa como cuando tenía 13 años. Mi confianza, mi diálogo interior, y sí, incluso mi vida sexual… ¡todo completamente arruinado!«, escribió a través de Instagram, junto a una fotografía suya de años atrás.
«Creo que mis días de rebeldía se debían al hecho de que siempre tenía que ser perfecta y bonita, me fui a los extremos y me volví salvaje«, agregó.
Con información de Yahoo.
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