El hijo de Camilo Sesto, visiblemente desmejorado tras su larga hospitalización por una fatal caída en bicicleta el pasado 24 de noviembre, se recupera en su domicilio después de recibir el alta médica el pasado 26 de enero.
El pasado 24 de noviembre, coincidiendo con su 38 cumpleaños, Camilo Blanes sufrió una caída con su bicicleta que tendría fatales consecuencias para él. Varias horas a la intemperie, incapaz de moverse, le causó una gravísima neumonía por la que ingresó a urgencia en el hospital Puerta de Hierro de Madrid.
A pesar de que por momentos se temió por su vida, el hijo de Camilo Sesto demostró su fortaleza y, después de dos meses hospitalizado, la mayoría de tiempo en terapia intensiva, el 26 de enero recibió el alta médica.
El joven experimentó una visible pérdida de peso durante su estancia en el hospital.
«Estoy muy bien, gracias» aseguró durante un tranquilo paseo por los alrededores de su domicilio, confirmando que aunque le queda por delante una larga rehabilitación, los médicos son positivos.
«Me han dicho que todo está bien».
La caída
«Fue por una caída en bicicleta», explicó, respondiendo así a los rumores de que su ingreso se podría haber debido a sus presuntas adicciones a las drogas o al alcohol. «Los días en el hospital han sido intensos, pero ya estoy mejor», agregó.
Agradecido por el apoyo que recibió durante los dos meses ingresado por parte de «mucha gente alrededor del mundo». Blanes que no tiene novia dijo que la joven que se turnó con Lourdes Ornelas en el hospital para no dejarlo solo en ningún momento es «una amiga».
«Ahora a caminar y a seguir con la rehabilitación«, cuenta el hijo del recordado cantante de «Vivir así es morir de amor». Asimismo, confesó que pese a su llamativa pérdida de peso y masa muscular «estoy fuerte».
«Ahora a andar y a comer bien», añade.
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