Kate Winslet dijo que se sintió cosificada en el pasado cuando rodaba escenas de sexo en algunas películas durante su carrera como actriz de Hollywood. En diálogo con Radio Times, la intérprete se refirió a una escena de amor entre ella y otra mujer en su nueva película Ammonite (se estrenó el año pasado en el Festival de Toronto), en la que dijo que todo fue natural, pero que eso justamente la había hecho dar cuenta de que se había sentido “objeto” en el pasado.
La actriz, quien saltó al estrellato por su papel en Criaturas Celestiales, hace casi 30 años, habló de cómo se había sentido a lo largo de su carrera. Y dijo que en algunas oportunidades había tenido la sensación de ser tratada como objeto, especialmente en ciertas escenas de sexo. Esta conclusión surgió luego de que Winslet hablara de cómo había sido rodar su último filme.
“No nos cosificaron de ninguna manera. Pero eso también me hizo dar cuenta de que me sentí un poco cosificada en el pasado”, dijo. Winslet protagoniza la película de Francis Lee donde interpreta a una paleontóloga inglesa (Mary Anning en la vida real), que se embarca en una relación secreta con Charlotte Murchison, interpretada por Saoirse Ronan. De las numerosas escenas íntimas de la película, la actriz de Titanic reveló: “Nos dimos cuenta de que al eliminar el diálogo, podríamos explorar más el deseo y la profundidad de la conexión entre estas dos mujeres. Se sintió muy igual y seguro”.
En 2008, Winslet ganó un Oscar por su papel en El lector, donde interpretó a una exguardia de prisión nazi que seducía a un adolescente. De hecho, la filmación se retrasó para que el coprotagonista David Kross cumpliera 18 años antes de filmar las escenas explícitas juntos. “Quiero que me dibujes como una de tus chicas francesas”, le decía a Leonardo DiCaprio en Titanic, en 1997, antes de quitarse la túnica y posar desnuda en un sofá, en una de tantas escenas donde su cuerpo se convertía en protagonista.
Además, la actriz reveló en la nota que nunca le habían hecho tantas preguntas sobre una escena de amor como las que protagoniza con Ronan en Ammonite. “Lo que definitivamente encontré sorprendente es que la gente parece hablar sobre las escenas de amor en la película de una manera mucho más centrada porque son dos mujeres”, dijo y agregó: “Y les digo, con la mano en el corazón, nunca me han hecho el mismo volumen de preguntas sobre escenas de amor de naturaleza heterosexual, de las cuales he filmado muchas en mi vida. Y eso, para mí, es una conversación“.
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