Difundieron un avance de la polémica y esperada entrevista de Oprah Winfrey a Meghan Markle y al príncipe Harry, en la que se espera que la duquesa de Sussex hable de lo “casi invivible” que era la vida en la familia real.
“Has dicho algunas cosas bastante impactantes…. espera, espera un minuto”, dijo la popular conductora ante lo dicho por Markle.
Winfrey, quien es la mujer más poderosa de los medios en Estadios Unidos, le preguntó a la duquesa de Sussex si permaneció callada o si le hicieron callar ante sus reclamos.
Durante el corto video, Meghan lució su embarazo mientras que el príncipe Harry en todo momento estuvo a su lado agarrado de su mano.
Winfrey le aclara que no hay ningún tema que no puedan tocar.
“Sabes, yo estoy realmente aliviado y feliz de estar sentado aquí hablando contigo con mi esposa a mi lado porque no puedo ni empezar a imaginar cómo debe haber sido para ella (Lady Di) pasar por ese proceso ella sola por todos esos años”, dijo el príncipe Harry refiriéndose a su madre.
“Porque ha sido increíblemente difícil para los dos, pero al menos nos tenemos el uno al otro”, agregó.
El escándalo no se detiene. Hace casi un año que los Duques de Sussex dejaron el Reino Unido, pero su salida suma otros capítulos. Esta vez por una próxima aparición televisiva.
La entrevista de 90 minutos que el príncipe Harry y Meghan Markle grabaron con Oprah Winfrey -y que se podrá ver el 7 de marzo- no cayó nada bien en el Palacio de Buckingham, y habría actuado como factor determinante para la comunicación oficial que se conoció justo antes del fin de semana pasado: los duques de Sussex renunciaron por completo a sus deberes como miembros de la familia real británica. De esta manera, se habría tomado una decisión extrema: reeditar todo el contenido para no causar mayores disgustos en la Corona británica.
Trascendió que la pareja habló sobre sus roles dentro de la familia real, que ahora se han modificado “significativamente”.
De acuerdo con diversos analistas ingleses, el núcleo del Palacio habría tomado la decisión de iniciar un corte decisivo con la pareja. Como consecuencia de la decisión comunicada por Harry y Meghan, perdieron los patrocinios que lograron conservar tras el Megxit. Además, la reina Isabel II les ordenó que renunciaran a todos los vínculos que todavía mantienen con organizaciones gracias a la familia real.
Una fuente cercana a la cadena televisiva CBS le dijo al Mirror: “Cuando el duque y la duquesa hablaron a cámara, nunca pensaron que les quitarían sus patrocinios. No lo vieron venir y hablaron porque todavía tenían papeles que desempeñar”.
De esta manera, se volverían a sentar con la Winfrey para discutir los “nuevos cambios” de vida. Tras conocer que los Duques de Sussex contarán toda su vida ante las cámaras de televisión, la familia real emitió un comunicado distanciándose del matrimonio: “El duque y la duquesa ya no son miembros activos de la familia real, por lo que, cualquier decisión que tomen con respecto a compromisos con los medios es de su responsabilidad. Como miembros no activos de la realeza, no tienen la obligación de informar a la Casa Real de dichos planes”.
Ni los duques ni el equipo de televisión midieron las drásticas consecuencias de la entrevista que tuvo lugar el martes pasado, día en que el abuelo de Harry, el príncipe Felipe, fue ingresado en el hospital “como medida de precaución” después de sentirse mal.
Se supo que Oprah Winfrey pasó dos días con los duques de Sussex filmando la entrevista. Una guerra de ofertas internacional por los derechos de la entrevista de Oprah con Harry y Meghan está en marcha antes de la transmisión. El programa de CBS está previsto para transmitirse a las 8:00 p. m. hora de la costa este de los EEUU, que será a la 1:00 a. m. del día siguiente en la isla del Reino Unido.
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