“¿Cómo puedo categorizarla? […] somos completamente opuestos, nos odiamos. Logan está frustrado con él, quiere estar un millón de kilómetros lejos de Deadpool, y si no es así, quiere golpearlo en la cabeza. Desafortunadamente, no puede estar un millón de kilómetros lejos de él en esta película, así que probablemente lo va a golpear mucho en la cabeza”.
Esta relación no debería sorprendernos, de hecho, nos sorprendería si fuera lo contrario. El (mal) humor y la personalidad de Wolverine es algo característico del personaje, y algo que Jackman ha interpretado a la perfección durante casi dos décadas hasta su retiro (y ahora su regreso). Deadpool, en cambio, es el mercenario que no se calla la boca, nunca, siempre habla, siempre molesta, y Reynolds también le ha dado vida de una forma genial en sus dos películas hasta ahora. Sus personalidades son polos opuestos, y ambos tienen el superpoder de la regeneración, no pueden morir. Verlos chocar constantemente en los cómics nos da una idea de lo que podremos ver en esta película.
La pregunta que se hacen muchos, en cambio, es cómo será posible. ¿Acaso Logan no murió en su propia película? ¿Qué está pasando? Bueno, la respuesta es sencilla, según Jackman: “esto sucede gracias a ese dispositivo o tecnología que tienen en el universo de Marvel para moverse entre líneas temporales, así que podemos volver al pasado porque, ya sabes, es gracias a la ciencia. Y de este modo no afectará lo que sucedió en Logan, algo que es importante para mí y creo que también para los fanáticos”.
Parece que todo será gracias a la tecnología cuántica. Hay rumores de que podríamos ver a Deadpool en la segunda temporada de Loki, o quizás en la próxima película de Ant-Man, pero sea como sea, parece que estamos cerca de ver a estos dos personajes pelear entre ellos y contra otros en distintas líneas temporales, y no puede ser más emocionante.
Con información de Collider