Al menos nueve personas heridas dejó el atentado en el que fue asesinado este miércoles el candidato a la Presidencia de Ecuador Fernando Villavicencio, cuyo supuesto autor falleció después de un tiroteo con el personal de seguridad, según informó la Fiscalía General de Ecuador.
EFE
Los heridos son parte de los asistentes al mitin que realizó Villavicencio en un coliseo de una concurrida y céntrica zona de Quito, donde a la salida un desconocido abrigó fuego contra el candidato a ocupar el sillón presidencial de Ecuador en las elecciones generales extraordinarias convocadas para el próximo domingo 20 de agosto.
Entre los heridos se encuentra una candidata a asambleísta y dos policías, precisó la Fiscalía, que junto a la Policía levanta indicios en el lugar de crimen y en el centro médico al que fueron trasladadas las víctimas.
Villavicencio fue asesinado al recibir disparos por parte de desconocidos a la salida de un mitin electoral de su campaña en un céntrico sector de Quito.
El candidato, que como otros postulantes tenía resguardo policial, había denunciado en días anteriores amenazas de muerte en su contra.
El asesinato de Villavicencio deja manchada más de sangre una campaña electoral donde la crisis de seguridad copaba prácticamente el debate político y las propuestas de los candidatos.
En semanas anteriores también fueron asesinados de manera similar el alcalde de Manta, Agustín Intriago, y un candidato a asambleísta por la norteña provincia de Esmeraldas.
Ecuador vive desde hace algo más de dos años la peor crisis de seguridad y violencia del crimen organizado de su historia que lo llevó a cerrar 2022 con la mayor tasa de muertes violentas de su historia, al registrar 25,32 por cada 100.000 habitantes.
La gran mayoría de estos homicidios intencionales están asociados, según el Gobierno, al crimen organizado y al narcotráfico, que ha ganado fuerza en la costa y ha convertido a los puertos ecuatorianos en grandes trampolines para la cocaína que llega a Europa y Norteamérica.