El escándalo de la compañía Monómeros Colombo Venezolanos nace en Barranquilla pero repica en Caracas y Bogotá.
Por ROBERTO DENIZ / JINETH PRIETO | Armado Info
La crisis de gestión y reputación de la compañía, en manos del gobierno interino de Juan Guaidó en Venezuela desde abril de 2019, esconde pugnas e intrigas de facciones político-empresariales venezolanas, pero también de compañías y renombrados bufetes de abogados colombianos, así como el rol de quien fuera el enlace político entre el interinato y la Casa de Nariño, residencia oficial de la presidencia de Colombia, luego del desconocimiento del gobierno de Iván Duque al régimen chavista.
El 29 de enero de 2019, cuando el equipo de Guaidó ni siquiera había oficializado la constitución de la embajada en Bogotá, el entonces canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, que fallecería casi dos años después, recibió una carta de Guaidó en la que este solicitaba de manera formal el congelamiento de “los activos pertenecientes a la sociedad Monómeros Colombo Venezolanos”.
El portador de la carta fue Jorge Luis Pacheco Hernández, un ingeniero colombovenezolano residente en Colombia desde 2015 y, más importante aún, un hombre con relaciones políticas tanto en Venezuela y Colombia, especialmente con figuras del opositor partido Voluntad Popular (VP), por el lado venezolano, y del Centro Democrático, el partido gubernamental, por el lado colombiano.
Lea la nota completa en Armado Info
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.