La Justicia de Bolivia ha rechazado una vez más una apelación presentada por la expresidenta del país Jeanine Áñez para el cese de la detención preventiva que cumple por el caso ‘golpe de Estado I’, en el que se le acusa de sedición, terrorismo y conspiración en el marco de la crisis postelectoral del año 2019 en la nación sudamericana.
Durante su intervención en la audiencia, la exmandataria ha denunciado que la Fiscalía «no ha aportado ni una sola prueba» para sostener la detención preventiva, y ha lamentado ser víctima de un «juicio político» en el cual se siente «en total indefensión».
En esta misma línea, ha remarcado que su estado de salud se ha visto «desmejorado» por las «instrucciones de hostigamiento y amedrentamiento» que la impiden recuperarse, tal y como recoge el diario boliviano ‘La Razón’.
«Cualquier cosa que me suceda es responsabilidad de este régimen de (Luis) Arce», ha reprochado la expresidenta en alusión al gobierno del actual mandatario del país.
A comienzos de diciembre, la Justicia del país ya denegó esta misma solicitud a la exmandataria alegando los argumentos de riesgo de fuga y obstaculización al caso, los cuales se han repetido en esta nueva audiencia.
Áñez se encuentra en prisión preventiva en el centro penitenciario de Miraflores, situado en la capital, La Paz, desde el 15 de marzo. Las autoridades bolivianas investigan el caso, conocido como caso ‘golpe de Estado’, tras la denuncia de la exdiputada del Movimiento Al Socialismo (MAS) Lidia Patty.
En las últimas semanas, familiares de la expresidenta han denunciado agresiones contra Áñez a cargo de funcionarios del centro penitenciario. Previamente, a mediados del mes de agosto, la exmandataria protagonizó un intento de suicidio.
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Alberto News
