El Gobierno de Brasil está enviando mensajes contradictorios sobre su programa y plazos de vacunación mientras vuelven a aflorar conflictos políticos entre gobernadores estatales y el presidente Jair Bolsonaro.
Después de decir que la aprobación de una vacuna podría tomar hasta 60 días, el ministro de Salud, Eduardo Pazuello, dijo el miércoles que una vacuna de Pfizer Inc. podría implementarse ya este mes. Si bien el Gobierno está negociando 70 millones de dosis de la farmacéutica estadounidense, aún no ha firmado ningún contrato de suministro.
“Si Pfizer obtiene la autorización de emergencia y adelanta la entrega de algunas dosis, podría realizarse a fines de diciembre o en enero”, dijo Pazuello a CNN Brasil. “Podría suceder en diciembre, por ejemplo, si recibimos las dosis, si cerramos el acuerdo con Pfizer; y el contrato está en proceso”.
Los comentarios de Pazuello llegan un día después de un polémico encuentro que mantuvo con gobernadores estatales. Los periódicos informaron sobre un desagradable intercambio entre el ministro y el gobernador de São Paulo, João Doria, sobre la vacuna CoronaVac, de Sinovac Biotech Ltd.
Pazuello es el tercer ministro de Salud que ha ocupado el cargo solo este año y hace poco regresó a trabajar después de luchar contra el covid-19. Un grupo de gobernadores solicitó recientemente al Gobierno agilizar un plan de vacunación a nivel nacional.
La etapa preliminar de cualquier vacuna se realizaría “en pequeñas cantidades, solo para uso de emergencia”, señaló Pazuello. El Gobierno ha apostado principalmente por la vacuna desarrollada por AstraZeneca Plc y la Universidad de Oxford, diciendo que podría comprar hasta 300 millones de dosis, parte de las cuales serán producidas localmente por Fiocruz.
El martes, Doria dijo en Twitter que interpeló al ministro para que actuara con urgencia y cuestionó la razón por la que la vacuna desarrollada por China que su Gobierno ha patrocinado no está incluida en los planes nacionales.
Pazuello respondió que el Gobierno comprará cualquier vacuna que obtenga la aprobación de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) y demuestre su eficacia.
A principios de esta semana, Doria dijo que su estado comenzará la vacunación el 25 de enero, pese a que los resultados de un ensayo de fase 3 aún están pendientes. Las autoridades estatales de salud esperan presentar documentos ante el regulador Anvisa antes del 15 de diciembre para obtener la aprobación.
Los conflictos políticos por el manejo de la pandemia por parte de Bolsonaro se han extendido hasta las vacunas. Doria, posible candidato presidencial para 2022, se ha enfrentado en reiteradas oportunidades con Bolsonaro y está tratando de acelerar el uso del tratamiento CoronaVac en el estado más poblado del país.
Brasil se ha visto invadido por el virus y tiene la segunda mayor cifra de muertes y la tercera mayor cifra de casos a nivel mundial. Las camas hospitalarias se están llenando una vez más en las principales capitales estatales en lo que representa una señal de una segunda ola o la continuación de una primera que nunca pasó por completo.
Bolsonaro, quien dice que no confía en una cura china contra el coronavirus “debido a su origen”, no planea vacunarse, pero dijo que las vacunas estarán disponibles para todos de forma gratuita si así lo desean.
“Brasil suministrará una vacuna de forma voluntaria y gratuita una vez que se haya demostrado su eficacia y haya sido autorizada por Anvisa”, dijo Bolsonaro en su cuenta de Twitter el martes por la noche. “Vamos a proteger a la población respetando las libertades y no usaremos esto para fines políticos, poniendo en riesgo la salud de las personas por sus búsquedas personales de poder”.
‘No podemos hacerlo en diciembre’
Si bien Pfizer está trabajando para comenzar la vacunación en Brasil “inmediatamente después” de obtener la autorización de emergencia del regulador, el titular para el país, Carlos Murillo, dijo que la firma solo podrá suministrar las vacunas en enero.
“No podemos hacerlo en diciembre. El objetivo para nosotros tendría que ser enero”, dijo a los legisladores en una audiencia virtual el martes. “En cuanto a las cantidades, necesitamos trabajar con el Ministerio de Salud. Comenzaría con pequeños suministros para luego aumentar”.
La cantidad de dosis que recibe Brasil dependerá de cuándo se firme el contrato y cuándo Pfizer obtenga la autorización de emergencia, dijo Murillo, quien estimó que Pfizer podría vacunar a “un par de millones” de brasileños en el primer trimestre de 2021.
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