El Gobierno de Colombia ha responsabilizado a las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de los graves incendios que están azotando la Amazonía colombiana y que han llevado a decretar una alerta ambiental y hospitalaria en Bogotá por la contaminación del aire.
«Las manos criminales de las disidencias de las FARC son las responsables de los incendios forestales desatados en varios puntos de la Amazonía colombiana», esgrime un comunicado emitido por la Presidencia del país que han presentado los ministros de Defensa, Interior y Medio Ambiente de Colombia.
La columna ‘Miller Perdomo’ –parte de las disidencias de la organización guerrillera– «ha buscado sistemáticamente» en los últimos cuatro días «generar incendios forestales» con la intención de «destruir el bosque» para acaparar tierras y para desarrollar acciones de ganadería extensiva ilegal para el blanqueo de capitales, según explica el texto.
Esta razón, según explica la Presidencia colombiana, ha motivado el lanzamiento de la ‘Campaña Artemisa’, por la cual 400 agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Colombia ingresaron hace cuatro días en la zona para «poder hacer las intervenciones» y «capturar a los responsables que originado este delito».
El Gobierno de Colombia ha ofrecido recompensas de hasta 66.000 euros (300 millones de pesos colombianos) para quien encuentre a alguno de los 17 «ecocidas» que el Ejecutivo ha identificado como autores de los incendios-. Estos incendios están afectando en gran medida en los departamentos amazónicos de Guaviare (sureste) y Caquetá (suroeste).
Por otra parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, ha asegurado que los incendios forestales que se están produciendo en la Amazonía colombiana tienen una incidencia negativa en la calidad del aire la capital del país, por lo que ha anunciado la declaración de alerta ambiental.
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Alberto News
