Naciones Unidas alertó de que alrededor de 1,9 millones de personas, unos 1,5 millones de libaneses y 400.000 migrantes, necesitan ayuda en Líbano a causa de la grave crisis económica que atraviesa el país y ha destacado que es necesario recaudar 300 millones de dólares para financiar los programas de apoyo a los necesitados.
Por Infobae
La coordinadora humanitaria de la ONU en el país, Najat Rochdi, lamentó que las autoridades no hayan puesto en marcha “a tiempo” las reformas necesarias y recordó que “muchos analistas” habían predicho la crisis. “No estamos hablando de algo que nos pille por sorpresa. Creo que todos lo sabían”, aseguró.
Así, recordó que “la crisis económica, la devaluación de la moneda y el vacío de poder ha implicado un derrumbe de los servicios públicos en un momento en el que era más necesarios”, antes de resaltar que la explosión registrada en agosto de 2020 en el puerto de Beirut “ha acelerado muchas cosas”, mientras que “la pandemia ha empeorado una situación que ya era frágil”.
Entre abril de 2019 y abril de 2021 el índice de precios del consumo se incrementó en más de un 200% y el precio de la comida y la bebida se disparó en un 670%, lo que provocó que más de la mitad de la población libanesa viva en estos momentos en condiciones de pobreza.
“El país está en medio de una fase de hiperinflación, erosión del valor de la moneda nacional, la capacidad de compra de la población y lo que queda de su confianza en sus líderes e instituciones”, sostuvo Rochdi, en un momento en el que cada vez más hogares se ven incapaces de permitirse cosas básicas como la comida, la electricidad, el agua o la educación.
“El sistema de sanidad pública está sobrepasado por el doble impacto de la crisis económica y la pandemia de coronavirus. Cada vez más gente se ve incapaz de acceder y permitirse tratamiento sanitario ante la ausencia de importantes medicinas y suministros”, advirtió Rochdi.
Asimismo, hizo hincapié en los niveles alarmantes de pobreza entre los refugiados, con un 90% de los refugiados sirios en situación de pobreza extrema, un aumento del 60% desde 2019. “La crisis afecta a todos en Líbano, no sólo a los libaneses. Líbano acoge al mayor número de refugiados per cápita en el mundo, con más de un millón de refugiados sirios y más de 270.000 refugiados palestinos”, recordó Rochdi.
En este sentido, reseñó que “las situaciones son conocidas” y “la lista de reformas prioritarias está articulada muy claramente en el marco Reforma, Recuperación y Reconstrucción (3RF)”, destinado a mejorar la gobernanza, la protección social, la cohesión social, la inclusión y el género, la sanidad, la educación y la vivienda en el país.
“En todos los casos se discutió con la sociedad civil, las autoridades locales, las autoridades nacionales, el sector privado y la comunidad internacional. Es algo claro. Lo que debe hacerse es algo sabido, muy sabido”, manifestó. “El desarrollo de Líbano es responsabilidad de los libaneses”, añadió.
“Siempre esperamos que a nivel interno, ya sea a nivel de liderazgo político u otro liderazgo, haya una decisión para poner los intereses del país y los intereses de los libaneses como una prioridad”, zanjó, en medio del estancamiento del proceso para formar nuevo Gobierno desde la dimisión en agosto de 2020 de Hasán Diab tras las explosiones en Beirut.
Lea la nota completa en Infobae
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.