El pasado martes 12 de octubre el secretario de defensa Alejandro N Mayorkas, anunció las futuras medidas que el Centro de Control y Prevención junto con el Departamento de Seguridad de Estados Unidos implementará para permitir el acceso a pasajeros no esenciales al interior del país.
Después de 19 meses desde el cierre de la frontera más transitada del mundo, el gobierno de Estados Unidos ha decidido comenzar a permitir la entrada vía terrestre y área a viajeros con propósitos no esenciales, esta medida implicaría un regreso paulatino a las actividades económicas y sociales que se llevan a cabo a lo largo de la frontera.
“Los viajes transfronterizos crean una actividad económica significativa en nuestras comunidades fronterizas y benefician a nuestra economía en general. Nos complace tomar medidas para reanudar los viajes regulares de una manera segura y sostenible”, argumentó Mayorkas.
A su vez Jeff Zients, coordinador de la administración de Biden para la respuesta a la pandemia, aseguró que las nuevas medidas para la regulación de entrada a pasajeros no esenciales comenzarán a efectuarse a partir de inicios de Noviembre.
A partir del próximo mes, los viajeros no esenciales necesitarán cumplir con la documentación correcta y correspondiente que asegure que el o la viajera cuente con el esquema de vacunación completo. No obstante, el país estadounidense solo permitirá el acceso a aquellas vacunas que hayan sido aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), siendo Pfizer/BioNTech, Moderna, Sinovac, Sinopharm, Janssen de Johnson & Johnson y algunas versiones de la vacuna desarrollada por AstraZeneca.
Por su parte, las vacunas CanSino y Sputnik V actualmente se encuentran en trámite para ser autorizadas por la Organización Mundial de la Salud, esto significa que las personas que cuenten con estas vacunas tendrán que esperar a que sean aprobadas por la OMS para poder acceder a Estados Unidos.
Según Our World in Data, a casi un año desde que la campaña de vacunación en América latina comenzó, Cuba, Chile y Uruguay encabezan la lista con mayor porcentaje de población total o parcialmente vacunada contra el COVID-19.
Cabe recordar que hasta antes del pasado martes, las autoridades estadounidenses sólo permitían el ingreso de personas sin vacunar a aquellas que contaran con propósitos esenciales como lo son estudiantes, conductores de camiones de carga y trabajadores de la salud, entre otros. Estas medidas también exigen a cualquier viajero, pruebas negativas a COVID, ya sea por PCR o antígeno.
Las regulaciones del título 19 sobre la entrada de personas a tierras estadounidenses, se verán modificadas en dos partes, la primera iniciará con la apertura de fronteras a viajeros no esenciales a partir de noviembre. La segunda comenzará en enero del 2022, en el cual se exigirá el esquema completo de vacunación a viajeros tanto no esenciales como esenciales para asegurar su ingreso al país.
Según el gobierno mexicano, el Plan Nacional de Vacunación implementado en el país, ha permitido el avance en la futura apertura de la frontera norte a partir de noviembre. La reapertura de la frontera México- Estados Unidos, también se debe a la vacunación total en 45 municipios en estados fronterizos y el porcentaje de inmunización a nivel nacional.
Según la Secretaría de Salud, en México se han aplicado 108.9 millones de vacunas, representando un 75% de la población vacunada con al menos una dosis, de igual forma, 123.9 millones de dosis han llegado a territorio mexicano y serán aplicadas en los días siguientes.
“El nuevo sistema de viaje creará consistentes y exigentes protocolos para todos los viajeros extranjeros que buscan ingresar a los Estados Unidos, ya sea por aire, tierra o ferry” sostuvo Mayorkas.
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