El Ejército de Israel confirmó este jueves que sus tropas en Gaza habían abatido al alto comandante de Hamas Ra’ad Thabet en el Hospital Al Shifa. El anuncio representa un importante paso para Tel Aviv, que logró neutralizar al jefe de personal y suministros de la milicia terrorista, “considerado entre los diez comandantes de militares de mayor rango” del grupo.
El portavoz de las Fuerzas de Defensa, Daniel Hagari, informó tras la confirmación del Shin Bet que Thabet había sido abatido por comandos de la Marina y otros oficiales de las tropas en el enclave mientras intentaba huir junto a otros combatientes hacia la zona del hospital.
Asimismo, el vocero confirmó que, gracias a sus maniobras en el centro de salud, se consiguió eliminar a cerca de 200 enemigos que habían tomado las instalaciones y las utilizaban como refugio, valiéndose de la fachada humanitaria e impidiendo el correcto cuidado de los pacientes.
“Aproximadamente 200 terroristas han sido eliminados en la zona del Hospital desde el inicio de la actividad”, comentó en un momento en que el Ejército intensifica sus maniobras, en lo que es ya su cuarto asalto, con miras a erradicar a los enemigos de esta zona y asistir en la evacuación de médicos, pacientes y equipos.
También, se detuvo allí a más de 900 sospechosos, de los cuales ya se corroboró que “513 son miembros de grupos terroristas” y ya se liberó a otros 350.
Por otro lado, Israel extendió sus ataques a las zonas de Al Amal y Naser, donde se ubican otras bases enemigas cercanas a los respectivos hospitales locales.
Mientras tienen lugar estas ofensivas, las cuales Israel parece decidido a expandir hasta Rafah, incluso con las críticas de la comunidad internacional, en el plano diplomático continúan las negociaciones por alcanzar una tregua que permita un alto el fuego temporal para la liberación de los rehenes y el ingreso de más ayuda humanitaria en la Franja.
La víspera, Estados Unidos, uno de los principales mediadores en el conflicto junto con Qatar y Egipto, anunció que se estaban produciendo “progresos” en las conversaciones que, tras el inicio del Ramadán, parecían estancadas.
“Creemos que durante la semana pasada y hasta este fin de semana se logró un progreso real para el acuerdo”, sostuvo el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller. No obstante, reconoció que en esta instancia avanzada resta definir cuestiones complejas, sobre la que -naturalmente- existirán fuertes discrepancias entre las partes.
“Cuando llegas al final (de una negociación), cuando progresas, los problemas que quedan son a menudo los más difíciles; por lo general, no se resuelven los problemas más difíciles primero, se resuelven al final”, apuntó.
La propuesta que está bajo debate en estos momentos contemplaría un cese de hostilidades de semanas -según trascendió, unas seis- durante las cuales se produciría un intercambio de rehenes israelíes -40 de los 130- por prisioneros palestinos.
Asimismo, Hamas desea que en este período se acuerden las bases para un alto el fuego definitivo y, con ello, la retirada total de las tropas israelíes, algo que el gabinete de guerra presidido por Benjamin Netanyahu ha descartado rotundamente, prometiendo desmantelar por completo al grupo terrorista.
(Con información de EFE)
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