La triste noticia de la muerte del príncipe Felipe, duque de Edimburgo, llenó de dolor a toda la Familia Real británica. Es por ello que, a pesar de la explosiva entrevista que los duques de Sussex le dieron a Oprah Winfrey -donde hablaron sobre la discriminación racial a su hijo y afirmaron que los royals estaban preocupados por el tono de su piel, entre otras fuertes declaraciones- el príncipe Harry volvió hoy a verse con toda su familia en el funeral de su abuelo, sin la compañía de su mujer, Meghan Markle.
Después del Megxit, el príncipe Harry se mudó a Los Ángeles y recién volvió a Inglaterra el fin de semana pasado, pero no pudo reencontrarse antes del funeral con su familia ya que cumplió la cuarentena en Frogmore Cottage. De todos modos, los hermanos no tendrán mucho tiempo para aclarar personalmente sus diferencias luego de la entrevista televisiva, ya que el domingo Harry volverá a Los Ángeles donde se reencontrará con su mujer, quien está a pocas semanas de dar a luz al segundo hijo de la pareja.
Los Duques de Sussex son padres del pequeño Archie, mientras que ahora esperan una niña. Por ello, Meghan Markle no pudo viajar por indicación médica, ya que se encuentra en la última etapa del embarazo y le desaconsejaron el viaje en avión.
El papel de la Duquesa de Cambridge será clave en la reconciliación de los hijos de Lady Di y el príncipe Carlos. Entre Kate y Harry siempre hubo una estrecha relación. De hecho, el príncipe solía referirse a ella como “la hermana menor que nunca tuve”. La Duquesa tiene una relación muy cercana con sus hermanos, Pippa y James, la misma que tenían William y Harry hasta que comenzaron los encontronazos y se distanciaron. Justamente, ella fue testigo de la buena relación que mantenían su marido y su cuñado, y ahora buscará mediar entre ellos para lograr recomponerla.
“Al tener una relación tan cercana con sus hermanos, Pippa y James, y haber sido testigo de primera mano del especial vínculo que tenían William y Harry, encuentra toda esta situación difícil y preocupante”, afirmó una fuente cercana a la Duquesa de Cambridge. “Es una persona que huye de los conflictos y espera poder aliviar las tensiones”. Por eso, Kate buscará desplegar sus dotes como mediadora e intentará poner paños fríos, para que Harry regrese a los Estados Unidos sin viejos rencores.
Según publicó The Telegraph, la duquesa de Cambridge se encuentra ante una situación “difícil y preocupante”, pero confía en poder aliviar las tensiones para recuperar el especial vínculo entre William y Harry.
Pero Kate no estará sola en esa tarea titánica. Tanto Eugenia de York, como la hija de la princesa Ana, Zara Tindall y su marido, Mike, colaborarán con la Duquesa para que los hermanos limen sus asperezas y puedan reconciliarse.
Por otro lado, la ausencia de Meghan Markle en Inglaterra evitará la conversación pendiente con Kate, ya que la Duquesa de Sussex aseguró que la mujer del príncipe William la hizo llorar.
Hasta este sábado en que se llevó a cabo el funeral de su abuelo, Harry no se había encontrado personalmente con su hermano mayor debido a la cuarentena, pero se sabe que hablaron telefónicamente. Tal vez, haya sido la antesala de una larga charla pendiente en la que puedan aclarar las diferencias del pasado y retomar la estrecha relación que tuvieron desde pequeños.
Desde que arribó a Londres, Harry solo había podido verse con su prima, la princesa Eugenia de York, quien aprovechó su visita en Frogmore Cottage -donde ella también se encuentra alojada- para presentarle a su hijo recién nacido, August, fruto de su matrimonio con Jack Brooksbank.
Durante el funeral, Harry se reencontró -no solo con William y Kate- sino con una buena parte de su familia, como su abuela la reina Isabel; su padre, el príncipe Carlos y su mujer Camila de Cornualles; sus tíos, los príncipes Andrés, Eduardo y Ana, y las parejas de estos últimos, Sofía de Wessex y Timothy Laurence. Sarah Ferguson no fue de la partida debido a que se encuentra separada del duque de York.
Además, se reencontró con su prima, la princesa Beatriz de York y su marido, Edoardo Mapelli; la princesa Eugenia y Jack Brooksbank; Lady Louise Windsor; Jacobo Mountbatten-Windsor; Timothy Laurence; Peter Phillips; Zara Phillips y Mike Tindall, entre otros integrantes que completan la selecta lista de 30 invitados.
Harry también se vio con los hijos de la fallecida princesa Margarita, David Armstrong-Jones, Lady Sarah y Daniel Chatto, los duques de Gloucester y Kent, la princesa Alexandra de Kent, los nietos de las hermanas del príncipe Felipe, el príncipe heredero de Baden, Bernhard, el príncipe Donato de Hesse, el príncipe Philipp of Hohenlohe-Langenburg y la condesa Mountbatten de Burma. Sin embargo, los 10 bisnietos del príncipe Felipe no estuvieron presentes para evitar el aglomeramiento de personas.
Sin embargo, durante el funeral Harry y William estuvieron alejados, ya que por decisión de la reina Isabel su primo Peter Phillips, hijo de la princesa Ana, se situó entre ellos durante todo el primer tramo. Luego, ya camino del cementerio, William caminará con Peter y, detrás de ellos, lo hará Harry con David Armstrong-Jones, hijo de la princesa Margarita.
El funeral se lleva a cabo apenas cuatro días antes del cumpleaños de la reina Isabel, quien el 21 de abril cumplirá 95 años. Seguramente, luego de este triste encuentro, los hermanos tendrán la oportunidad de hablar en la intimidad y se espera que puedan reconciliarse antes de que Harry regrese a los Estados Unidos.
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