El exmandatario boliviano y presidente del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales, aseguró este lunes que la «derecha» busca dividir a su partido político con argumentos relacionados a la renovación o modificación ideológica.
EFE
«La derecha quiere enfrentarnos (…) so pretexto de renovación», aseguró Morales durante una rueda de prensa en la ciudad de Cochabamba acompañado por dirigentes sindicales del llamado Pacto de Unidad, que aglutina a sectores indígenas y campesinos afines al oficialismo.
El ex jefe de Estado recalcó que los integrantes del MAS son «una gran familia» que, además, «cuida la soberanía nacional» y comparó a los supuestos intereses de división a pleitos entre padres e hijos o nietos y abuelos.
Morales, que ha venido sosteniendo varias asambleas de su partido a nivel nacional, señaló que seguirá en esa labor para profundizar «programas sociales» y articular la defensa del presidente boliviano, Luis Arce.
En el MAS, que tiene previsto realizar un congreso nacional el próximo 4 de agosto para la adecuación interna de reglamentos y estatutos, «no está en debate la posición ideológica», dijo Morales y ratificó la orientación de su partido como «antimperialista» y «anticapitalista».
Justamente Morales en unas declaraciones este fin de semana a la radio cocalera Kawsachun Coca descartó una reconciliación con sus opositores por los hechos de 2019 y los llamó «fascistas y racistas».
El expresidente boliviano señaló a modo de condicionamiento que esos grupos de oposición deben entender que la «ideología» y el «programa» del MAS «están bien para Bolivia».
Este lunes, el exmandatario volvió a señalar a los grupos de «derecha» de querer «criminalizar al movimiento indígena y a los movimientos sociales», además, de buscar la división.
Asimismo, Morales dijo que «algunos compañeros» están «confundidos» y aceptan ese discurso de renovación en el MAS.
«Ni interna ni externamente nos vamos a dividir», sentenció Morales.
Consultado sobre las últimas revelaciones sobre el caso del material antidisturbios enviado por Argentina y Ecuador en 2019, Morales dijo que «está en manos de la Justicia» y que «la gente sabe» que cuando renunció a la Presidencia del país fue porque «hubo golpe (de Estado)».
Incluso relacionó los envíos de aquel material como un «Plan Cóndor del siglo XXI», en referencia a la colaboración que existió en la década de 1970 entre Gobiernos militares de Suramérica con fines represivos.
No obstante a esto, el líder de la opositora Comunidad Ciudadana (CC), el expresidente Carlos Mesa, en una declaración a los medios este lunes señaló como una «tramoya vergonzosa» ese caso que ahora quiere hacer creer a Argentina y a Ecuador que en Bolivia hubo un «golpe de Estado».
Ese suceso forma parte de la investigación llamada «golpe de Estado» y por la que están bajo reclusión la expresidenta interina Jeanine Áñez, dos de sus exministros, y varios exjefes militares por los cargos de terrorismo, sedición y conspiración.
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.