Los sindicatos franceses esperan este jueves manifestaciones masivas contra la reforma de las pensiones del Gobierno de Emmanuel Macron, a la que se oponen de forma unánime, y dan por hecho que habrá nuevas jornadas de huelga, que en algunos sectores podrían tener carácter indefinido.
«Es una primera jornada y habrá otras», subrayó el secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT), Philippe Martínez, que en una entrevista al canal Public Sénat, hizo hincapié en que «es raro que los sindicatos en Francia estén de acuerdo. Es un indicador de que la situación es grave».
Martínez recordó que todas las centrales coinciden en rechazar el que es el eje central de la reforma, el retraso de la edad mínima de jubilación de los 62 años actualmente a 64, y el adelanto a 2027 de un cambio que ya estaba previsto en otra reforma precedente, el aumento del periodo de cotización de 42 a 43 años para poder recibir una pensión completa.
Aunque no quiso avanzar cifras de cuántos manifestantes habrá en las alrededor de 200 marchas que se van a organizar por todo el país, señaló que las informaciones que le llegan vienen a confirmar una gran participación porque hay un «gran descontento».
Hizo notar que los sondeos muestran que la población está «muy mayoritariamente» contra la reforma y «entiende la jornada de manifestación».
Laurent Berger, secretario general de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT), primer sindicato del país, insistió en otra entrevista al canal BFMTV en que «tiene que haber mucha gente» en la calle y pidió que las marchas se desarrollen «de forma pacífica».
Berger cargó contra Macron por unas declaraciones en las que decía que no creía en «la victoria de la irresponsabilidad», detrás de las que cree que está tratando a los trabajadores como personas que no son suficientemente maduras.
«¿Creen que hoy habrá cientos de miles de personas irresponsables (en la calle), que les da igual el equilibrio de las cuentas públicas?», se preguntó retóricamente.
Aludía así a una de las principales justificaciones de la reforma, que es equilibrar desde el punto de vista financiero el sistema de pensiones que, sin cambios, tendría un déficit de entre 10.000 y 15.000 millones de euros anuales en el horizonte de 2030.
Martínez, por su parte, volvió a reprochar al jefe del Estado que en una jornada como la de hoy no vaya a estar físicamente en Francia, sino en España, donde participa a la cumbre bilateral de Barcelona.
«Cuando hay una gran movilización, se pretende haber cambiado para estar más a la escucha, es el día de estar en Francia», señaló.
El ministro de Trabajo, Olivier Dussopt, que sí se ha quedado en Francia y que es el principal responsable de la explicación de la reforma, reconoció que el texto todavía puede cambiar durante el debate parlamentario que empezará a comienzos de febrero, pero de forma marginal.
Dussopt, en otra entrevista al canal LCI asumió los desacuerdos con los sindicatos sobre el retraso de la edad mínima de jubilación.
EFE
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.