En medio de una rueda de prensa, el presidente de Colombia, Iván Duque hizo un escueto pronunciamiento tras las sospechas de muerte de Hernán Darío Hernández, alias El Paisa, jefe de la ‘Segunda Marquetalia’ y exmiembro de las extintas Farc, a quien la prensa local informó que había sido abatido en el estado Apure, Venezuela el pasado fin de semana.
“La información que hay es que ese hombre salió de circulación”, informó el primer mandatario desde la Casa de Nariño, quien no brindó mayores detalles de cómo se dio la neutralización del responsable del atentando al Club El Nogal en 2003, pero que sí enfatizó en que su abatimiento “le sirve a Colombia”.
Según conoció la opinión pública por fuentes de inteligencia, el criminal habría sido dado de baja en medio de enfrentamientos a fusil y explosivos durante una emboscada planeada, presuntamente, por otros disidentes del acuerdo de paz y que se alzaron en armas para unirse a la guerra de nuevo. Por otro lado, hay hipótesis que aseguran que la muerte de El Paisa fue bajo la autoría de alias Gentil Duarte, otro de los criminales más buscados del país.
El pronunciamiento de Iván Duque, por ahora, es la única información oficial que se ha conocido, dado que ni el Ejército o el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela han brindado detalles al respecto, por lo que aún queda la duda de si El Paisa murió realmente.
Cabe recordar que el Gobierno de Colombia y las fuerzas policiales anunciaron una recompensa de más de 750 mil dólares por información acerca de Velásquez.
Dentro del prontuario criminal de uno de los jefes de las disidencias de las FARC reposan los 36 muertos y más de 200 heridos que dejó la explosión de El Nogal; sin embargo, desde muchos años atrás el Paisa ya venía cometiendo múltiples crímenes en el país.
El criminal era oriundo de Remedios, Antioquia; creció en Medellín, justo cuando Pablo Escobar inició uno de los carteles de narcotráfico más violentos de Colombia. En ese mismo grupo empezó su actividad delictiva: aprendió de tráfico de estupefacientes, tráfico de armas, tácticas de guerrilla urbana y llegó a trabajar como sicario.
Con este inicio, según información del centro de pensamiento Insight Crime, al cumplir sus 19 años alias El Paisa ya tenía varias órdenes de captura en su contra. Con las autoridades siguiéndole la pista, el criminal pensó que debía buscar protección externa al Cartel de Medellín, y en ese momento fue cuando se alió con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).
Esa misma entidad emitió un pronunciamiento tras conocerse la supuesta muerte de El Paisa: “Las células de las exfarc están fuertemente arraigadas en las minas de oro de Amazonas y en el estado fronterizo de Apure, y parecen estar moviéndose hacia el este, a estados como Bolívar. Algunos de estos grupos gozan de estrechas relaciones con el gobierno venezolano. Otros, sobre todo el Frente 10 en Apure, se han enfrentado agresivamente con el Ejército de Venezuela, pero no han sido desalojados”, refleja un reciente informe de la Unidad de Investigación de la organización InSight Crime.
Cabe anotar que en 1993, El Paisa ya era una de las cabezas importantes de las Farc. En ese año fue puesto al mando de la columna móvil Teófilo Forero, que para ese entonces apenas se estaba creando. Posteriormente Víctor Suárez, alias Mono Jojoy, el fallecido comandante del Bloque Oriental, vio sus “habilidades para el terrorismo” y decidió encargarle el aumento de la capacidad militar de los subversivos.
En este punto alias El Paisa ya era uno de los guerrilleros más temidos del país y había anotado más delitos en su prontuario. En este se destaca la Toma de Miraflores en 1998 y el asesinato del político liberal Diego Turbay Cote y su familia en el 2000. Además, en 2002 él mismo se atribuyó el haber enterrado los diálogos de paz propuestos por el expresidente Andrés Pastrana.
Entre propiedades rurales, pago de “vacunas” y “comisiones por tránsito de vehículos”, El Paisa recaudó hasta 2.000 millones de pesos, lo que ahora equivale a más de USD$504.261.
Estas acciones le confirmaron a las autoridades la gran influencia que tenía El Paisa dentro de las Farc, y por eso, para 2013, se creó la Fuerza de Tarea Júpiter, una subdivisión del Ejército Nacional exclusiva para combatir a la columna móvil Teófilo Forero. El objetivo era detener, o al menos limitar, la acción criminal de Velásquez, quien habría ganado más poder después de la muerte de Mono Jojoy y Guillermo León Sáenz, alias Alfonso Cano.
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