Los proyectos de ley son un esfuerzo por dar pasos específicos hacia adelante mientras los líderes del Congreso discuten el plan integral de inmigración del presidente Joe Biden, y los pasos de procedimiento iniciales podrían darse el martes. Los republicanos están cambiando su enfoque para atacar a Biden por una nueva oleada de llegadas a la frontera entre Estados Unidos y México.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, una demócrata, dijo el domingo que el aumento de niños migrantes que llegan a la frontera fue una «crisis humanitaria» agravada por el «sistema roto» de inmigración restrictiva que dejó el expresidente Donald Trump.
Pero los republicanos han acusado que la afluencia es el resultado de la reversión de Biden de algunas políticas de línea dura de Trump, y el líder republicano de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy la etiquetó como la «crisis fronteriza de Biden» durante un viaje a la frontera el lunes.
El primer proyecto de ley de inmigración que se espera en la Cámara esta semana ofrecería un camino eventual hacia la ciudadanía para los «Dreamers», esos inmigrantes que viven ilegalmente en los Estados Unidos después de ingresar cuando eran niños. También ayudaría a los destinatarios de protecciones migratorias temporales que permiten a los inmigrantes de varios países afectados por desastres o conflictos vivir temporalmente en los Estados Unidos.
La medida, patrocinada por la representante Lucille Roybal-Allard, podría ayudar a que más de 4,4 millones de personas sean elegibles para la residencia permanente en Estados Unidos, según el Migration Policy Institute. Ya fue aprobada por la Cámara una vez, en 2019, con 237 votos; siete de ellos eran republicanos.
El segundo proyecto de ley, patrocinado por la representante Zoe Lofgren, pondría a un millón de trabajadores agrícolas indocumentados en el camino hacia la ciudadanía, dijo un asistente demócrata. Tiene un copatrocinador republicano, el representante Dan Newhouse. Treinta y cuatro republicanos votaron a favor de la medida cuando fue aprobada por última vez en la Cámara en 2019.
Ninguno de los dos proyectos fue aceptado en el Senado cuando tenía mayoría republicana. Ahora que los demócratas tienen un control limitado de esa cámara, esperan poder atraer algún apoyo republicano.
Pero el senador Lindsey Graham, uno de los principales republicanos en conversaciones pasadas sobre inmigración, dijo que dudaba que se pudiera lograr un progreso bipartidista en la legislación antes de que se detuviera el último aumento en las llegadas a la frontera.
«Creo que va a ser muy difícil conseguir un proyecto de ley bipartidista elaborado sobre cualquier cosa que tenga un componente de legalización hasta que detenga el flujo», dijo Graham a los periodistas el lunes por la noche.
El mes pasado, los demócratas presentaron formalmente la amplia reforma migratoria de Biden en el Congreso, una medida que proporcionaría un camino hacia la ciudadanía estadounidense para aproximadamente 11 millones de inmigrantes en el país ilegalmente. Se enfrenta a grandes probabilidades de aprobarse, ya que ningún republicano lo ha apoyado públicamente y no está claro si todos los demócratas respaldan el enfoque.
«Creo que la presidenta Pelosi ha descubierto que no tiene apoyo para el proyecto de ley integral en la Cámara», dijo el segundo demócrata del Senado, Dick Durbin, quien también preside el Comité Judicial de esa cámara. «Y creo que eso también indica dónde está en el Senado».
Pero Durbin dijo que una vez que la Cámara haya aprobado las dos medidas de inmigración esta semana, él y otros senadores tendrán que buscar un consenso bipartidista sobre un proyecto de ley «con esos dos como puntos de partida».
Reuters
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