Hamas envió un fuerte aluvión de cohetes a las profundidades de Israel el jueves cuando Israel atacó Gaza con más ataques aéreos y convocó a 9.000 reservistas más. La incesante escalada de hostilidades se produjo incluso cuando los negociadores egipcios mantuvieron conversaciones en persona con las dos partes, intensificando los esfuerzos de mediación.
Fares Akram | Joseph Kraus | AP
Los enfrentamientos anteriores entre Israel y los gobernantes de Hamas en Gaza, incluida una devastadora guerra de 2014, se limitaron en gran medida al empobrecido y bloqueado territorio palestino y a las comunidades israelíes en la frontera. Pero esta ronda parece estar creciendo más y más que en cualquier otro momento desde la intifada palestina de 2000, o levantamiento.
Si bien algunos ataques con cohetes han llegado al área de Tel Aviv, turbas árabes y judías han arrasado las calles, golpeando salvajemente a la gente e incendiando automóviles. Los vuelos han sido cancelados o desviados del principal aeropuerto del país.
Mientras tanto, los palestinos cansados marcaron sombríamente el jueves el final del mes sagrado musulmán del Ramadán cuando los militantes dispararon una andanada de cohetes tras otra e Israel llevó a cabo oleadas de ataques aéreos que hicieron temblar los huesos. Desde que comenzaron los cohetes el lunes, Israel derribó tres edificios de gran altura que, según dijo, albergaban instalaciones de Hamas después de advertir a los civiles que evacuaran.
El Ministerio de Salud de Gaza dijo que el número de muertos ha aumentado a 87 palestinos, incluidos 18 niños y ocho mujeres, con 530 heridos. La Jihad Islámica confirmó la muerte de siete militantes, mientras que Hamas reconoció la muerte de 13 de sus militantes, incluido un alto comandante. Israel dice que el número de militantes muertos es mucho mayor.
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