Desde que Francisco López Centeno, “Chico López”, se posicionó en el mundo de la política nicaragüense a inicios de la década de 1990, su fortuna y sus múltiples negocios no han dejado de crecer. Se cuentan hasta 20 empresas, entre constructoras e inmobiliarias en las que su nombre está relacionado, y muchas de ellas, con un historial turbio y lleno de escándalos. Chico López sigue valiéndose de mil argucias al amparo de la pareja presidencial.
Víctor Vala | Expediente Público
Francisco López Centeno fue sancionado por Estados Unidos bajo la Ley Magnitsky el 5 de julio de 2018, y se vio obligado a renunciar a sus altos cargos administrativos en Petróleos de Nicaragua (Petronic) y la Empresa Nicaragüense de Minas (Eniminas), pero siguió fungiendo como tesorero del FSLN.
López también continuó desde las sombras de Alba de Nicaragua (Albanisa), la empresa constituida por Petronic y Petróleos de Venezuela (Pdvsa), sin importar que ya tenía designado a un nuevo vicepresidente unos días más tarde, hecho que fue más visible cuando el presidente Daniel Ortega, lo nombró a finales de julio de 2019, ministro asesor presidencial para la producción y el comercio.
El comunicado del Departamento de Estado de los Estados Unidos que acompañó la publicación de las sanciones a Chico López, el jefe de la Policía Nacional, Francisco Díaz y el secretario de la Alcaldía de Managua, Fidel Moreno, relacionó al tesorero del Frente Sandinista con actos de corrupción en el manejo discrecional de la cooperación venezolana en Nicaragua, que era administrada directamente por sus manos a través de Albanisa.
“Ha sido acusado de utilizar su posición en beneficio propio y el de su familia, al usar compañías de su propiedad para ganar contratos con el gobierno”, detalla el comunicado.
Sus empresas siguen trabajando para el gobierno y delinquiendo de una manera muy metódica, enriqueciéndose de forma desleal sin importar la enorme debacle económica que ha dejado la represión antes, durante y después de abril de 2018, en que la crisis financiera ha desmoronado a Nicaragua de forma tal que solo ha sido comparada por los expertos con la crisis de los años 80.
Además de eso, el engranaje de sus millonarios negocios personales con el Estado de Nicaragua y las pequeñas alcaldías del país no han cesado ni un momento. En realidad, no han hecho más que aumentar, pues la venta de adoquines o la construcción de calles son el fuerte de varias empresas de López.
Múltiples investigaciones periodísticas acerca de Chico López han develado desfalcos, préstamos, negocios secretos y contratos millonarios como una de las personas de mayor confianza de Ortega. Este trabajo, además de ser un recuento de las más relevantes investigaciones, incluye, entre otras cosas, que un millonario préstamo de Albanisa fue a parar a una empresa fantasma para realizar un proyecto que jamás se llevó a cabo. Así también, la corrupción imperante en el robo del proyecto Casas para el Pueblo y las millonarias cantidades de dinero que han ido a parar a los bolsillos del Frente Sandinista y de López con los cobros de las viviendas a los supuestos beneficiarios.
El consentido de Ortega
José Francisco López vino al mundo el 17 de septiembre de 1950, él es el poderoso y millonario tesorero del Frente Sandinista en Nicaragua. Nació en el pueblo minero de Santo Tomás, en Chontales, pero su familia se trasladó a la capital en 1955, exactamente al barrio San Judas. Tiene 6 hermanos más y su apellido materno no aparece en su cédula de identidad: Centeno.
A este hombre de 69 años de edad de contextura recia se le conoce como hombre religioso, no toma alcohol ni le señalan vicios y tiene 6 hijos, tres hombres y tres mujeres. Algunas personas cercanas dicen que tiene una gran afición por los tigres de Bengala y los animales exóticos, al punto de que hay un pequeño zoológico en su finca bautizada “La Sobriedad”, en la comunidad rural Los Pérez, en el kilómetro 37 de la carretera vieja a León.
A López Centeno no se le conoce “militancia histórica” en el Frente Sandinista, a como llaman a los guerrilleros y militantes del partido de gobierno que se integraron al movimiento desde la década de los sesenta y setenta. Se dice que fue mensajero de la guerrilla en el barrio San Judas, en la capital. No obstante, no hay registros de que haya sido guerrillero. En los años ochenta no ocupó cargos políticos relevantes. El periodista Ernesto Aburto, primo de López, reveló a La Prensa que fue jefe de operaciones de Embanoc, la empresa bananera de Occidente, en Chinandega.
Continúe leyendo en Expediente Público
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.