El capo más buscado durante la última década en todo el mundo y que tuvo los peores enfrentamientos con bandos rivales en México ya no corre peligro por algún ajuste de cuentas. Ahora quien podría matar al Chapo Guzmán, es un hongo en los pies.
El narcotraficante mexicano que cumple cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad en Florence, Colorado, denunció las circunstancias de su confinamiento y lo ha calificado como «cruel».
Un hongo en los pies podría matar al Chapo Guzmán, quien fuera el líder máximo del Cartel de Sinaloa y uno de los hombres más ricos del mundo gracias a la fortuna obtenida por el narcotráfico.
Los abogados de Joaquín Guzmán Loera denunciaron que no se ya podido atender la infección.
¿Cómo contrajo el hongo el Chapo Guzmán?
De acuerdo a lo publicado por La Opinión, Joaquín “El Chapo” Guzmán contrajo el hongo en los pies que ‘le salió’ por compartir corta uñas con otros presos.
La acusación calificada como una ‘exageración’ podría no serlo. Ya que especialistas aseguran que las infecciones por hongo en los pies podrían ponerlo en ‘riesgo de morir’ debido a su ‘precaria condición de salud’.
“Desde su llegada a Estados Unidos, el señor Guzmán ha sido mantenido en la prisión en unas condiciones crueles e inhumanas, equivalentes a una tortura física y mental”, dijeron sus abogados.
Efe obtuvo el documento en el cual se enumeran varias denuncias sobre las precarias condiciones en las que el Chapo Guzmán cumple cadena perpetua por narcotráfico.
Así cumple su condena el exlíder del Cártel de Sinaloa
El Chapo pasa la mayor parte del tiempo en una celda de 2 metros de ancho por 3.5 de largo, excepto dos horas a la semana en las que es trasladado a un patio de 9 metros cuadrados.
Abogados del narcotraficante han denunciado que su representado solo habla español y todos en el lugar se dirigen a él solo en inglés. A parte se niegan el acceso a canales en español y programas educativos.
La calidad y cantidad de la comida y la limpieza de su celda son otras de las quejas del narcotraficante que ya mostró anteriormente su disgusto por las condiciones de su encarcelamiento.
“Se ha quejado de la cantidad y calidad de las comidas y ha explicado que las porciones son mínimas y que se queda con hambre”, escribieron los abogados.
Estás no son la primeras quejas del narcotraficante. En 2019 cuando su juicio estaba en marcha en un tribunal de Nueva York, sus abogados calificaron de «extremadamente restrictivas» las condiciones de su encarcelamiento.
En ese momento estaba internado en el Centro Penitenciario Metropolitano de Nueva York.
A pesar de las reiteradas quejas las condiciones ‘no mejoran’
Ante las repetidas quejas de sus abogados, que en junio de 2019 pidieron que su cliente pudiera pasar dos horas en el patio de dicha prisión el juez Brian Cogan rechazó la demanda.
Cogan aseguraba que su confinamiento tenía “el legítimo objetivo de evitar que escape de la prisión o que ordene cualquier ataque contra individuos que cooperaron con el Gobierno”.
Por el reciente escrito de Joaquín Guzmán, sus condiciones, casi dos años después, en la conocida como “Alcatraz de las Rocosas” no han mejorado, indica Efe.
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