El flamante mandatario de Perú, Francisco Sagasti, confirmó este lunes importantes cambios en las cúpulas de la Policía luego de la violenta represión ejercida durante las protestas contra la destitución del expresidente Martín Vizcarra, quien se vio obligado a dejar el puesto por un pedido de vacancia presidencial aprobado por el Congreso el 9 de noviembre.
Tras la salida de Vizcarra, el líder del Parlamento, Manuel Merino, asumió la Presidencia del país andino, pero a las pocas horas debió renunciar al cargo en medio de importantes protestas callejeras, que tildaban lo sucedido como un «golpe de Estado». Aquellas revueltas terminaron con dos muertos y centenares de heridos. Acto seguido, Sagasti se convirtió en el nuevo jefe de Estado y a tan solo seis días de haber tomado el control del Ejecutivo decidió nombrar a un nuevo comandante, César Augusto Cervantes, y dar de baja a 15 generales.
«Estas medidas tienen por finalidad fortalecer a la Policía», argumentó el presidente en un mensaje televisivo. De esta forma, Cervantes reemplaza a Orlando Velasco, quien estaba a cargo de la fuerza desde el 7 de agosto, aunque se encontraba de licencia médica en los momentos de los enfrentamientos callejeros.
Entre tanto, la Fiscalía local inició una investigación penal contra Merino y dos de sus ministros por la respuesta de las fuerzas de seguridad en los momentos de tensión ciudadana. Así, se intenta determinar la línea de mando entre el Gobierno y la Policía para definir a quiénes indagar en la Justicia. Por otro lado, la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU envió una delegación a Lima para obtener información de los hechos. Sobre ello, Naciones Unidas ya destacó el «uso indebido de armas menos letales y de agentes vestidos de civil».
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.