En Colombia, durante el año 2019, se dejaron de plantar unas 15.000 hectáreas de cultivos de coca en comparación con el año anterior. Sin embargo, eso no impidió que la producción local aumentara un 1,5% durante el mismo período en ese país.
Por Primer Informe
Esto significa que Colombia produjo 1.136 toneladas métricas de cocaína en 2019. Los cultivos de coca cubrieron 154,000 hectáreas en ese mismo año, una caída de las 169,000 hectáreas registradas en 2018. Los datos son del del Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (SIMCI) de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito ( UNODC).
Según la ONU, estas cifras detienen la tendencia de crecimiento que comenzó en 2014, sin embargo, la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (ONDCP) de la Casa Blanca, maneja unas cifras que se contradicen con las de la ONU.
Según las autoridades de los EE.UU la superficie sembrada con coca se incrementó en 4.000 hectáreas el año anterior para registrar un total 212,000 hectáreas de cultivos. La Casa Blanca también informó un aumento en la producción de cocaína de 879 a 951 toneladas métricas.
Curiosamente, la Casa Blanca registró 58,000 hectáreas más de cultivos de coca que la UNODC, pero registró 185 toneladas métricas menos de cocaína.
La UNODC atribuye el aumento en la producción de cocaína a una tendencia que comenzó en 2015. Los cultivos de coca se han concentrado en gran medida en territorios favorables al «ciclo de producción completo».
Los nuevos métodos de los carteles de la droga les permiten obtener más cocaína con mayor pureza de sus cultivos.
Narcotraficantes mejoran sus métodos
La simple erradicación de cultivos no puede resolver el problema de la cocaína en Colombia.
Ciertas zonas, que conducen no solo a cultivar coca, sino también a producir y contrabandear cocaína, están experimentando aumentos en la coca.
Estos incluyen los departamentos del Valle del Cauca y Norte de Santander, que, según el informe de la UNODC, vieron aumentos en la tierra utilizada para cultivar coca en un 82% y un 24%, respectivamente. Además estas zona permiten la producción y la exportación de la cocaína.
De Valle del Cauca la droga tiene salida a través de la costa colombiana en el océano Pacífico. En el otro extremo del País, el Norte de Santander, la droga sale hasta Venezuela y de allí a Centroamérica y el Caribe.
El otro aspecto es que las organizaciones criminales se han hecho más eficientes y ahora pueden obtener cada vez más cocaína de menos cultivos.
Se emplean mejores productos químicos, por lo que la transformación de la hoja de coca se ha vuelto más profesional y han logrado una mejor calidad. Los carteles ahora se enfocan en puntos estratégicos y la capacidad técnica.
Con información de Insight Crime
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