El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha anunciado este miércoles el envío a Moldavia de 30 toneladas de ayuda para atender a los refugiados ucranios que llegan a este país. Además, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) desplegará su hospital de campaña en la frontera.
El País
Así lo ha explicado durante una rueda de prensa conjunta en Chisináu junto a su homólogo moldavo, Nicu Popescu, durante la que recordó que este año se celebra el 30 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países y que hace ahora 15 años desde la primera y única visita de un ministro de Asuntos Exteriores de España a Moldavia.
El jefe de la diplomacia española ha asegurado que estaba en Moldavia «con un doble gorro» el de ministro de Unión Europea y el de ministro de Cooperación porque el objetivo principal de su visita era «abordar la grave situación que atraviesa Europa en general, Ucrania en particular, pero que golpea con dureza Moldavia» especialmente «en su vertiente humanitaria a través del flujo de refugiados que no cesa de llegar», y que «son vidas anónimas para nosotros, pero con nombres y apellidos y dramas humanos individuales».
Albares ha denunciado que «hay una guerra ilegal, injusta, cruel, en nuestro continente, cuyas consecuencias se trasladan a los países vecinos y por supuesto a Moldavia» por la que se ha producido «una llegada masiva de ciudadanos ucranianos», y «aunque muchos están en tránsito», ya «han entrado 350.000 ucranios huyendo de la guerra, dejando sus vidas de manera dramática detrás», lo que «representa prácticamente el 10% de la población total de Moldavia». «Desde la Unión Europea y España por supuesto como país somos conscientes de esta situación», ha subrayado Albares, «y por eso hemos anunciado el 7 de marzo el envío de ayuda humanitaria a Ucrania y Moldavia por valor de 100 millones de euros».
Además, ha añadido el ministro, «se han entregado ya a Moldavia 60 millones de euros para hacer frente a unas necesidades energéticas particularmente dependiente del suministro de gas ruso». Albares ha dicho que las autoridades europeas «son conscientes de que estas medidas no son suficientes para paliar el drama humano» en las fronteras de Ucrania, pero ha reiterado que «España va a seguir trabajando para paliar esta situación, este dramahumano de gente que tiene que abandonar injustamente todo», y para «impedir que desestabilice a países fronterizos como Moldavia».
El jefe de la Cancillería ha avanzado que la Aecid lidera «un esfuerzo sin precedentes de asistencia humanitaria en la cooperación española», que «se está traduciendo en más de 30 toneladas de ayuda que ya están en camino, y si todo va bien, estarán llegando este fin de semana» a Moldavia, con material para atender a los refugiados. Y ha añadido: «He puesto a disposición de las autoridades moldavas el hospital de campaña de la Agencia Española de Cooperación, que llegará en breve en cuanto que las formalidades necesarias se hayan resuelto».
Por último, el titular de Exteriores ha informado de la activación y el apoyo a las organizaciones internacionales humanitarias con experiencia sobre el terreno como Acnur, la Cruz Roja y ONG españolas que están ya presentes en este país como es el caso de Acción contra el Hambre, «para inmediatamente venir en ayuda y asistencia del gobierno de Moldavia y de los refugiados que se encuentran aquí». Igualmente, Albares ha ofrecido «la solidaridad española para acoger a refugiados de esta terrible crisis en los tres centros de Barcelona Madrid y Alicante».
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