A una semana de dejar la presidencia, Iván Duque reveló en entrevista con la directora de SEMANA, Vicky Dávila, el plan que hubo para asesinarlo en Cali durante el Paro Nacional del año pasado.
Por Semana
Durante las protestas, la capital del Valle del Cauca fue una ciudad convulsionada por los bloqueos, la delincuencia y el desorden. Esto motivó que el mandatario viajara en varias oportunidades para restablecer el orden, poniendo en riesgo su vida en más de dos ocasiones.
Duque recuerda que, justamente, los criminales querían aprovechar el caos que reinaba en Cali para hacerle un atentado con poderosos explosivos.
“La situación fue muy compleja. En medio de los bloqueos, hubo una información de que, a la llegada de la caravana presidencial, querían bloquearla y ponerle una bomba lapa al carro en el que me transportaba”, reveló el mandatario.
El plan para asesinarlo, afortunadamente, fue descubierto a tiempo por su equipo de seguridad gracias a información de inteligencia: “Desarticulamos el plan, cambiamos los horarios y llegamos a Cali a la madrugada. Volvimos a los dos días. Después vino el atentado en Cúcuta. La verdad, siempre mantengo mi fe y mi coraje intactos”.
Cabe recordar que el presidente viajó a Cali sorpresivamente el 10 de mayo en la madrugada, luego el 11 para presidir un consejo de seguridad relámpago y después volvió el 28 de ese mes con ese mismo objetivo y realizar un recorrido por las calles de la ciudad.
De hecho, el general retirado Eduardo Zapateiro le contó días atrás a SEMANA que, efectivamente, querían asesinar a Duque en la capital del Valle del Cauca.
“Sí, correcto. Teníamos además información de que iban a activar cargas explosivas a la llegada del avión del señor presidente. De hecho, eso nos pasó en Cúcuta, donde intentaron asesinar al presidente cuando iba con sus ministros de Defensa, Interior y el gobernador de Norte de Santander. Esto le costó la salida al general Pinto y al comandante de la Brigada 30. Era la Narcotalia infiltrando las instalaciones militares. Pero eso sirvió para que hiciéramos autocrítica y revisáramos el esquema presidencial”, dijo.
Zapateiro expuso, además, que información de inteligencia señalaba que durante el paro no solo se fraguaron planes para asesinar al presidente en Cúcuta, por parte de las disidencias de las Farc (Gaor 33), y en Cali, sino en la propia Casa de Nariño.
“Se hablaba de francotiradores instalados en los barrios aledaños a la Casa de Nariño. Tuvimos que desplegar la inteligencia, la contrainteligencia e instalar tropas especiales. Al árbol que más frutos da, es al que más garrote le dan”, mencionó.
Pese a todos los peligros que rodearon al mandatario, Zapateiro aseguró que Duque “siempre estuvo a salvo de todo eso”.
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