Actualmente, hay 520.000 refugiados procedentes de Ucrania en los países vecinos y la cifra ha ido aumentando «exponencialmente, hora tras hora», dijo el lunes Filippo Grandi, alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Grandi, que se dirigió al Consejo por teleconferencia desde Ginebra, dijo que ha trabajado en crisis de refugiados durante casi 40 años y que «rara vez había visto un éxodo tan increíblemente rápido de personas, el mayor seguramente dentro de Europa desde las guerras de los Balcanes».
«Más de 280.000 han huido a Polonia. Otras 94.000 a Hungría, casi 40.000 están actualmente en Moldavia, 34.000 en Rumanía, 30.000 en Eslovaquia, decenas de miles en otros países europeos. También sabemos que un número considerable se ha ido a la Federación Rusa», dijo Grandi.
Grandi dijo que los trabajadores humanitarios de la ONU han sido reubicados y que los ataques militares podrían obligarles a desplazarse de nuevo.
«La situación avanza tan rápidamente, y los niveles de riesgo son tan elevados a estas alturas, que es imposible para los trabajadores humanitarios distribuir sistemáticamente la ayuda, la asistencia que los ucranianos necesitan desesperadamente», dijo Grandi.
«Hay que proteger y salvar a los civiles y a las infraestructuras civiles, y hay que conceder acceso humanitario a los que prestan ayuda a los afectados por la guerra. No hacerlo agravará los niveles de sufrimiento humano ya extraordinarios», dijo.
Con información de CNN en Español
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