Un profesor de taekwondo fue sometido a juicio en Chile, luego de ser acusado de maltratar al menos a tres de los alumnos menores de edad que asistían a la escuela de artes marciales que él dirige. En caso de ser declarado culpable, la justicia podría impedirle que continúe realizando sus clases.
La acusación contra el sensey describe maltratos psicológicos a tres alumnos de su clase (dos niñas y un niño). El autor de las humillaciones fue declarado culpable del delito de trato degradante por el Juzgado de Garantía de Chillán, ciudad ubicada a 419 kilómetros al sur de la capital chilena. Según cercanos, supuestamente inspirado en una serie de Netflix en la que se muestra a un “sensey” ofendiendo a sus alumnos.
El profesor de artes marciales desarrolló sus clases en un recinto deportivo denominado ‘’Taekwondo Guerreros Sepul’’ entre los años 2017 y 2018, tiempo en el que trató de ‘‘llorona, tonta y débil’’ a una niña de ocho años frente a otros estudiantes.
Tras el complejo escenario exhibido, el sujeto le ordenó al resto de los alumnos que se formaran, diciéndoles que ‘’el taekwondo era un deporte para valientes y que quien no estuviese preparado para aguantar, debía retirarse, que así era el trato hacia un deportista de alto rendimiento’’.
Como consecuencia al maltrato, la menor sufrió de un drástico cambio en su personalidad y de hecho, según consta en la denuncia, habría intentado quitarse la vida, razón por la que tuvo que iniciar un tratamiento psicológico que la acompaña hasta el día de hoy.
El segundo caso tuvo lugar durante el mismo período señalado, pero ahora la víctima fue un niño de 10 años, a quien el profesor lo molestaba de manera frecuente, burlándose de que estaba gordo, además de referirse a él como ‘’niñita’’, provocando el llanto del menor en reiteradas ocasiones.
Mientras que la tercera denuncia hacia el instructor de dicho arte marcial fue por maltrato psicológico hacia una menor de 14 años, quien sufrió una degradación por su condición física, y a quien el instructor le ordenaba que ‘’debía cerrar su boca’’. Ante esto, el profesor afirmaba que ‘’no estaban en una clase de ballet’’.
El fiscal Florentino Bobadilla, funcionario de la Fiscalía Regional de Ñuble, declaró que, a raíz de estos tratos degradantes en contra de la dignidad, las víctimas sufrieron estrés postraumático en un grado de alta intensidad según los informes de una psicóloga del Servicio Médico Legal de Chillán, y de frustración deportiva y baja autoestima, por parte de uno de los afectados.
El Ministerio Público de la zona, por su parte, solicitó tres penas de 180 días de cárcel efectiva, además se inhabilitó al imputado por tres años y un día para ejercer su oficio como profesor de artes marciales a menores de 18 años, y también se le otorgaron 60 días de asistencia a un programa especial de rehabilitación para maltratadores. En tanto, luego del juicio simplificado, que comenzó hace dos semanas, el tribunal fijó la audiencia de comunicación de sentencia para el próximo 21 de abril.
El delito de maltrato degradante es relativamente nuevo para la justicia chilena, pues se tipificó en 2019 y por lo tanto, existe una jurisprudencia muy acotada al respecto.
El propio fiscal Bobadilla, hizo hincapié en que dicho delito se creó para atender situaciones de vulnerabilidad que presentan los niños, niñas y adolescentes, pero que, de igual manera, está enfocado en adultos mayores y en personas que están en condición de discapacidad.
‘’Es importante que se considere como delito, pues son tratos que atentan contra la dignidad del ser humano y, en lo particular, viene a desmitificar y a desmentir la idea de que, por el hecho de que se trate de un deporte que requiere un alto nivel de disciplina (taekwondo), se pueda pasar por sobre la dignidad de los alumnos’’, declaró el fiscal.