Una figura de la Virgen de los Dolores sobrevoló este Viernes Santo el centro de México en helicóptero a fin de mantener la tradición religiosa sin vulnerar las medidas de distanciamiento social decretadas en el país durante la pandemia de COVID-19.
EFE
La diócesis del estado de Querétaro retransmitió en vivo mediante sus redes sociales el recorrido de esta procesión aérea. En esta, la Virgen bendijo varios pueblos queretanos y municipios del vecino estado de Guanajuato frente a la pandemia, que acumula 3.441 enfermos y 194 fallecidos en el país.
«Jesús Eucaristía sigue recorriendo el territorio de la Diócesis de Querétaro en compañía de la Bendita imagen de Nuestra Señora de los Dolores de Soriano, hoy Viernes Santo», informó la diócesis en su página de Facebook.
En el helipuerto, antes de despegar el aparato, un sacerdote rodeado de un pequeño grupo de personas arrodilladas dijo: «hoy recordamos la carne viva de Cristo clavada en la cruz. Junto a Jesús siempre estuvo su madre Dolorosa.
La diócesis retransmitió en primer plano la figura de la Virgen, con los pueblos y campos de Querétaro y Guanajuato en el fondo, mientras un narrador detallaba los puntos del recorrido.
«En este Viernes Santo, el pueblo de Xichú, Guanajuato, es bendecido por el Santísimo Sacramento acompañado de la Virgen de los Dolores de Soriano», publicó la diócesis en Facebook en un punto de la procesión aérea.
Querétaro, que alberga la Basílica del Santuario de Nuestra Señora de los Dolores, es uno de los estados de México donde hay mayor devoción a la Virgen de los Dolores, una advocación de la Virgen María.
En esta ocasión, la tradicional peregrinación de la figura de la Virgen tuvo que ser aérea por la pandemia de covid-19 y recorrió los poblados queretanos de Chichimequillas, Amazcala, La Griega, y el Colorado; así como Santa Rosa Jáuregui, San José Iturbide, El Capulín, Doctor Mora y Tierra Blanca, en Guanajuato.
De esta forma, se completó el recorrido iniciado el Jueves Santo sobrevolando los municipios que conforman la diócesis de Querétaro.
México, el segundo país con más católicos en el mundo, solo superado por Brasil, ha visto muy afectada la celebración de la Semana Santa por las medidas de distanciamiento social decretadas para evitar contagios del coronavirus.
La histórica y multitudinaria procesión de Iztapalapa, en Ciudad de México, tuvo que celebrarse a puerta cerrada por primera vez desde 1843 y retransmitirse de forma telemática.
El gobierno de México decretó la emergencia sanitaria hasta el 30 de abril, lo que obliga a parar las actividades económicas no esenciales. También exhortó a la población a quedarse en sus casas, aunque la cuarentena no es obligatoria para no afectar a las millones de personas empleadas en el trabajo informal.