El exdiputado opositor del Parlamento de Venezuela Williams Dávila fue detenido la noche del jueves, luego de participar en una manifestación en Caracas, en donde cientos de personas pidieron la liberación de los considerados presos políticos, informó a EFE este viernes el abogado penalista y defensor de derechos humanos Rafael Narváez.
EFE
«Ayer se realizaba una vigilia (…) En esa vigilia asistió el exgobernador Williams Dávila, también parlamentario en el año 2015, y saliendo de allí lo abordan una camioneta sin placas y dos motorizados», explicó Narváez.
Señaló que Dávila fue «interceptado» por estos vehículos y que los funcionarios que se lo llevaron detenido no contaban con la identificación de a qué cuerpo de seguridad pertenecen.
Narváez indicó que, hasta el momento, desconoce en cuál centro de reclusión se encuentra detenido el exdiputado antichavista, militante del partido Acción Democrática (AD).
«Es decir, aquí estamos en presencia de una detención arbitraria», apostilló.
El abogado sostuvo que, en Venezuela, hay un «esquema de persecución política, sin garantías, donde los poderes públicos, lamentablemente, han despreciado sus atribuciones en lo que tiene que ver con» la Constitución.
Asimismo, dijo que Dávila fue operado del corazón en noviembre pasado, por lo que toma medicamentos que «no puede interrumpir».
AD explicó, a través de X, que el exparlamentario fue detenido por «personas con armas, sin uniforme o identificación de cuerpo policial o militar».
Igualmente, la mayor coalición antichavista, Plataforma Unitaria Democrática (PUD) exigió saber su paradero y la «inmediata liberación».
«Esta escalada represiva y de persecución debe parar y alertamos al mundo de la misma. Venezuela decidió por el cambio y este debe comenzar con una transición en paz ya», apostilló.
El jueves, cientos de venezolanos se manifestaron en Caracas por la liberación de los considerados presos políticos, así como para rechazar la «represión» que -denunciaron- se desató a raíz de las protestas contra el resultado oficial de las presidenciales del 28 de julio, que otorgó el triunfo al mandatario Nicolás Maduro, lo que ha sido cuestionado dentro y fuera del país.
Durante la manifestación, el coordinador legal de la ONG Provea, Marino Alvarado, indicó que hay «2.500 presos políticos», la gran mayoría detenidos desde el 29 de julio, y señaló que a «absolutamente todos se les está aplicando la ley antiterrorismo» que contempla penas de hasta 30 años de cárcel, la máxima del país.
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