Se trata de mujeres, principalmente venezolanas, que llegaron al sur de Chile para ejercer el comercio sexual, ingresando al país por pasos no habilitados.
Para su arribo, recibieron instrucciones de personas que las ayudaron a cruzar la frontera por pasos ilegales como Colchane o Chacalluta y una vez en territorio nacional, debían entregar todo el dinero ganado a quienes las “supervisaban”.
Los investigados son 5 y las primeras víctimas identificadas 6, sumándose ahora otras mujeres (entre 6 y 8 más) que estaban sufriendo el mismo vejamen, lo que fue abordado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos en la región de Los Lagos, en voz de su director, Mauricio Maya.
Maya agregó que quienes hayan sido víctimas de una organización de éste tipo deben denunciar los hechos ante las autoridades.
El fiscal jefe de Puerto Montt, Marcelo Maldonado, aseguró que en los próximos días serán presentados en estrado nuevamente los imputados.