Representantes del Sindicato de Profesionales Técnicos de la Docencia y Conexos del Estado Cojedes (Sinprotec), hicieron un llamado a los docentes, personal administrativo y obrero, de esta entidad federal, a no incorporarse al llamado que hizo el ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz, de comenzar las clases del nuevo año escolar el 16 septiembre, que se harán a distancia por la pandemia de COVID-19. Las declaraciones fueron ofrecidas el jueves 13 de agosto en su sede de San Carlos.
Wolfang Maya, presidente de Sinprotec Cojedes, dijo que en el país no existen las condiciones favorables para reactivar el sistema educativo y mucho menos cuando el docente no ha sido reivindicado salarial y socialmente. Aseguró que los docentes prácticamente se mueren de hambre. Igualmente, hizo un llamado a los directores que persiguen a los maestros a actuar apegados la ley.
Maya aseguró que el Gobierno y el Ministerio de Educación incumplieron la segunda contratación colectiva que venció el pasado mes de abril. Agregó que les deben seis aumentos salariales a lo que se le suma las incidencias lo que representa 883% desde octubre del 2018 a enero del 2020.
Explicó que los docentes no cuenten con seguro médico ni servicio funerario. «Lo que gana un docente no le da ni para comprar una aspirina. Un docente con categoría uno cobra 887.000 bolívares mensuales que equivale a 3.09 dólares. Un docente seis cobra un 1.025.633 que representan 3.57 dólares y la canasta básica está por el orden de los 65.000.000 equivalente a 276 dólares. ¿Cómo hace un docente para sobrevivir?
Aseguró que los docentes y su grupo familiar se mueren de mengua. Calificó de farsa el llamado del Istúriz al no contar el magisterio con las condiciones mínimas para el inicio de clases. Dijo que invocan al artículo 91 de la Constitución donde se establece un salario digno.
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