Con 47 muertos y 57 heridos se saldó una presunta revuelta ocurrida el pasado primero de mayo en la cárcel Los Llanos en Guanare, estado Portuguesa, que habría comenzado por un supuesto intento de fuga, aunque aún no existe un parte final por parte del régimen de Maduro.
La organización no gubernamental Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) indicó que las muertes ocurrieron luego de que los presos protestaron porque no se les estaba entregando los alimentos que sus familias les llevaban, lo que terminó en un motín con trágicas consecuencias.
Las impactantes imágenes de cómo fueron reconociendo a los muertos en el motín de Guanare
Por su parte, Iris Varela, ministra del Servicio Penitenciario de Venezuela, afirma que se encuentra investigando señalamiento de que un pran de la cárcel obligó a otros reclusos a atacar puestos de seguridad en el penal, por lo que los presos habrían sido abatidos al ingresar irregularmente a una zona especialmente controlada por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Este sería el motín número 12 desde 2013 cuando Iris Varela es nombrada ministra de asuntos penitenciarios.
Durante la reyerta resultaron heridos el director del centro penitenciario y una teniente de la GNB.
Fuentes periodísticas del estado Portuguesa explicaron a Primer Informe una versión que toma fuerza, y que explica que en medio de la revuelta, funcionarios de la GNB abrieron un portón invitando a los reclusos que se escaparan, asesinando por la espalda con ráfagas de disparos a quienes supuestamente atravesaron esa puerta.
La cárcel de Los Llanos posee una capacidad para 750 reclusos y actualmente hay 2500 personas, víctimas de hacinamiento y desidia, lo que expone a numerosos detenidos al riesgo de contraer coronavirus
Aún no se conoce una versión oficial por parte del régimen de Maduro sobre los hechos que condujeron a esta situación y tampoco han dado un recuento final sobre los muertos de esa tétrica jornada.
Así acumularon los cuerpos en la morgue
Sólo 26 familias habían recibido los cuerpos de sus seres queridos, según indicó OVP, además muchas familias no pueden desplazarse hasta la morgue por la falta de gasolina en el país, además de las restricciones a la circulación debido al coronavirus y los elevados costos que supone trasladarse.
Según testimonios ofrecidos por familiares de las víctimas, en el lugar no hubo enfrentamientos sino una masacre: «Ellos estaban pidiendo la visita y pidiendo la comida y saludando a la visita que estaba esperando, ellos sí es verdad habían cruzado la línea del margen hasta donde ellos pueden pasar y sin mediar palabra empezó la plomamentazón», dijo uno de los entevistados.
Otra de las familiares relata que «los reos del Centro Penitenciario de Los Llanos fueron objeto de una masacre, queremos desmentir ante los medios sociales que en ningún momento hubo intento de fuga, que en ningún momento se presentó una fuga por parte de los reos, que estaban esperando el pase de comida el cual fue retardaro (…) y fuimos maltratados por los guardias, incluso vino un alto mando de la Guardia Nacional donde dio la voz de alto y no se tomó en cuenta. Nos fuimos apartados hacia el lado posterior, hubo una masiva movilización tanto del CICPC como de otro organismo, fueron retirando primeramente a los heridos y después a los fallecidos».
Otro entrevistado dijo que tenía información de que en el cementerio de la zona harían una fosa común para todos los muertos por lo ocurrido en esa cárcel.
Las ONU ha informado que en Venezuela, la mayoría de las cárceles están plagadas de ratas e insectos, que los detenidos no siempre tienen acceso a luz natural, comida o agua.
El uso excesivo de la prisión preventiva, también representa un problema en el sistema carcelario venezolano pues representa al 63% de la población penitenciaria en el país.
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